.̫❀ No te acepto, Luna ; ❝東京卍レベルアップ❠ ✿ ❛kisanma❟

.̫❀ 001 ; ❝Pudrete Kisaki❠ ✿ ❛kisanma❟

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La mañana para todos había empezado fresca, con el inmenso cielo azul celeste, el sol en su máximo esplendor y las nubes apenas se veían con él, sin embargo, para él, solamente había sido un despertar más como los muchos otros que tuvo y tendrá a lo largo de su vida.

Entre las sábanas sin tener la más mínima gana de levantarse se hizo una completa bolita abrazando con sus brazos sus rodillas, dándole la espalda por completo al alfa menor, quién hacía más de media hora se había levantado y se había puesto a observar al más salto en total silencio.

Cabe destacar que hacía ya tiempo que los besos o mimos al despertar habían cesado, pues, así como el alfa había dejado de mimarlo como era costumbre en aquél momento, el omega también había parado con lo suyo, dejando solo los saludos de buenos días quedaron intactos en el ambiente cada que ambos se veían levantados ya sea así en la cama o en la cocina cuando alguno se levantaba a desayunar.

Hanma con sus ánimos un tanto bajos, se giró en la cama, está vez para conectar miradas con el más bajo lo observó un buen rato en total silencio, dudando si o no podía levantarse y tirarse a los brazos de este para poder brindarle todo ese cariño que hace tiempo estaba reteniendo, sin embargo, bajo toda negación, solamente le sonrió por lo mínimo y exclamó "Buenos días, Kisaki" en un susurro.

Sin embargo, por parte del Alfa, se notaba lo realmente intranquilo que estaba, además de su tan patética acción de poder ocultar sus feromonas de culpa y angustia, algo que jamás le pasó, pero como hoy todo su yo estaba en un completo lío, el simple hecho de poder ocultar su aroma se le hacía difícil.

Debía de admitir que, se sentía la peor escoria en esos momentos, como hace días, sin embargo, para él, era lago que no podía simplemente dejarlo pasar, hacía tiempo que Hanma ya le había parado de provocar emociones, además de por lógica, atraerlo tanto físicamente como sentimental.

Había cambiado bastante, se notó el aumento de peso en sus mejillas más gordas, el descuide un poco de su piel al sentirla un poco más seca de lo normal, lo más insoportable en su actitud melosa de que querer estar con él todo el tiempo. Todo había cambiado y con lo poco y nada que ya había conseguido para quererlo, se había esfumado por completo cuando, después de diez años juntos, consiguió abrirse pasó entre más omegas y betas mucho más bonitos y menos molestamente melosos que Shuji.

Algo qué, aunque realmente no debía de importarle, lo ponía en una situación de culpa y arrepentimiento. Sobre todo con su lado animal, que hasta había dejado de ser tan presente con él. En especial, cuando estaba en esos encuentros con esos omegas.

Por dios, hasta su estúpido lado animal lo catalogaba cómo escoria.

Y lo peor, es que no se detendría por nada del mundo.

— ¿Podemos hablar, Hanma? —, su tono de voz había sonado más grave y autoritario de lo normal. Detalle que el chico recientemente levantado no pasó por desapercibido.

El nombrado se alarmó,sin embargo no lo demostró a más que una mirada confusa. Si no lo había respondido con otro "Buen día" era obvio que el asunto era grave o de suma importancia.

Lo primero que pensó fue que había sucedido algo con la administración o la Mafia, que Mikey necesitaba de él o alguna cosa relacionada de su trabajo, no lo qué sus oídos escucharon minutos después de puro silencio.

— Quiero el divorcio...

— ¿Qué? —, preguntó confundido mientras su mente acaparaba la información, repitiendo esas simples tres palabras de forma automática una y otra vez para llegar a algo. Eso había sido muy inesperado. Los minutos en un sepulcral silencio para ambos fueron eternos.— Espera, ¿es alguna clase de broma? Porque si lo es, ¡caí en ella totalmente! —, respondió con una risita que a diferencia de la que siempre suele hacer, está estaba cargada de miedo y desesperación.— Amor, estás muy bromista últimamente.