Cuando Dos Mundos Se Alinean (Novela Cristiana)

Capítulo 20

Pasaron varios meses desde aquel entonces. 

La semana pasada estuvimos cargados de exámenes, le pedí a Dios por sabiduría, estudié muchísimo para estas pruebas, puesto que ya eran las últimas, de hecho, Andy y yo estuvimos repasando mucho los temas de Química, ahora solo debíamos esperar por los resultados.  

La profesora Vivian nos mencionó que el baile de celebración por nuestra graduación será en dos semanas, pero que ya debemos ir pensando en prepararnos para ese día. Me emociona muchísimo, de hecho, ya debo buscar en qué universidad iniciaré mi carrera de Psicología. 

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Después de terminar un día más de clases, llegué a casa muy cansada. 

Mis padres estaban sentados en la mesa tomando café, mi madre tuvo día libre y mi padre salió temprano del trabajo. 

Yo los saludé y me senté junto a ellos mientras mi madre me servía café y unos bocadillos. 

—Cuéntame, mi amor, ¿Cómo te fue hoy?— Me preguntó mi padre. 

—Muy bien, gracias a Dios, prácticamente, ya son mis últimos días en la secundaria, en dos semanas será el baile de graduación— Respondí con una sonrisa. 

—¿De verdad?, Dios mío, qué rápido pasó el tiempo— Decía papá con sorpresa. 

—Tienes razón, querido, un día de estos debemos ir por tu vestido para el baile de graduación, hija, por cierto, ¿Ya sabes dónde estudiarás Psicología?— Dijo mi madre mirándome.

—No, aún no he buscado, los exámenes me tuvieron muy ocupada últimamente, pero hoy mismo lo haré— Contesté decidida. 

Mientras nosotros tres estábamos sentados en la mesa, mi hermana Katherine bajó de su habitación, se veía muy elegante, tenía un jeans beige y una blusa blanca con estampados de flores rosadas. 

Desde aquel encuentro en la pizzería, Katherine y Adam han salido varias veces, ella siempre nos cuenta que van al centro comercial, al cine, al parque de atracciones y también les encanta caminar por el parque que está cerca de casa. 

—Papá, mamá, Kristel, ¿Cómo me veo?— Preguntó acercándose a nosotros. 

—Hija, te ves preciosa— Contestó mi padre. 

—Pareces una bella muñequita, mi niña— Agregó mi madre. 

—Es cierto, Kate, te ves muy elegante— Mencioné con una sonrisa.

Katherine soltó una risa nerviosa, algo bastante tierno para nosotros. 

—Gracias, familia, los amo mucho— 

Segundos después, Adam llegó por ella, Katherine se despidió de nosotros y salió por la puerta. 

—Es tan lindo ver que Adam y Katherine salen juntos, es uno de los muchos propósitos de Dios para con ellos— Mencionó mi madre mientras tomaba su café. 

—Tienes razón, mi amada Helena, nuestra hija Katherine ha crecido y merece ser muy feliz, al igual que nuestra pequeña Kristel— Contestó mi padre mientras me miraba con una sonrisa. 

Los tres sonreímos, yo tomé la mano de mi padre y la de mi madre cariñosamente. 

Mi padre había dicho que él hablaba en serio cuando le dijo a mamá que se volvería a casar con ella, de hecho, este domingo tendrán su pequeña boda en la Iglesia, es como un tipo de renovación de votos, el Pastor Mark les dijo que él estaba de acuerdo en volver a unirlos como pareja.