Konradin

1."When We Were Young"

-Konradin,pasarás directamente al Gymnasium-dijo mi padre mientras yo tallaba mis ojos,porque recién me despertaba tras aquel largo trayecto en automóvil.

No sabía a ciencia cierta en ese entonces nada de nuestro repentino cambio de alojamiento.

Asentí,y empecé a detallar a las personas que de un lado a otro iban.Fruncí mi ceño cuando cuatro personas en fila caminaban ataviados de negro con una estrella amarilla en el lado izquierdo de su pecho.

...

Inspiré hondo intentando ocultar los nervios que cosquilleaban en mi abdomen,no era la primera vez que acudía a una escuela pero igual la intranquilidad de no saber que me deparaba me mataba desde dentro.

Enderecé mi espalda cuando el director dio dos golpes a la puerta que frente a nosotros se alzaba.

Nadie acudió así que el mismo hombre tomó el pomo y lo giró.

El tumulto de gritos cesó,mostrando un mínimo de respeto al dirigente que me acompañaba.

El aula no era muy grande,pero habían muchos pupitres apelotonados,estaban casi todos ocupados menos uno delante de un chico que no despegaba sus ojos de nosotros...¿o de mí?
Miré mis zapatos y luego me fijé en mi vestimenta por si acaso iba algo desaliñado pero no,sentía que iba a la perfección.

El profesor con las manos temblorosas se acercó a nosotros,empezó a cuchichear algo con quien conmigo entró.Sus ojos se abrieron cuando escuché cómo pronunciaban mi apelativo entero.

Su vista se posó en la mía,y pronunciaron entonces mi nombre en voz alta y luego me preguntaron una serie de cosas mientras yo tomaba asiento delante de él.

...

En mis primeros días me enteré de varias cosas,puede que algunas tengan más relevancia que otras,pero a fin de cuentas eran asuntos que me harían entender un poco más a los que me rodeaban.
Un factor que sí noté fue como Hans,mi compañero de atrás,comenzó a soltarse más en cada asignatura que impartimos.Se le veía un chico calmado,no se relacionaba con nadie,pero desde las sombras nos acechaba a todos mas no lo hacía con el mal apoderándose de sus ojos.
De todas las personas que día a día me acompañaban aquellas seis horas de mañana e intentaban hablarme,ya sea por mi status social,por querer hacer amigos o cualquier otro motivo,solo anhelaba que en algún momento fuese él el que me pidiese la pluma,el lápiz...

Hubo un instante en el que pensé lanzarme a hablar con él,que fue cuando en educación física se cayó mientras efectuaba un salto,pero dí un paso atrás por lo que la gente pudiera pensar,así que solamente de lejos ví como se elevaba .

'En otro momento será'.

Y así ocurrió días después.

...

Diría que me acuerdo del momento en el que nos empezamos Hans y yo a relacionarnos pero estaría mintiendo,porque en mi corazón y memoria solo guardaba  aquellas charlas intensas que tuvimos,aquellas en las que tanto aprendí...Tengo leves nociones de que nos mostramos unas monedas,de que prometí enseñarle mi colección...Pero el paso del tiempo,como he dicho,solo me ha ayudado a resguardar los momentos que son oro.

Como aquel día en el que regresamos del instituto y la casa de los vecinos de Hans en llamas empezó a arder,y él no entendía el cómo ni porqué de dicho acontecimiento.

Comenzó a cuestionarse si de verdad existía un Dios,y si era así porque él creaba el mal,porque a gente inocente este dañaba...

-Hans,si no existiese el bien y el mal no habría ningún equilibrio,y no estaríamos supongo que aquí.

-Pero Konradin esto no es justo,no puede ser que hasta sus hijas pequeñas hayan sufrido esto...

-Bueno,podemos al menos pensar ahora que en paz descansaran-alcé mis hombros,y él elevó una ceja.

-¿Tú crees en las otras vidas para saber eso?

-No,pero si pensamos eso imagino que las pérdidas dolerán menos,¿no crees?-hizo un mohín de duda.-¿Y tú?¿Crees en las otras vidas?

-Sí.-Respondió tangente.

-¿Por qué?

-Porque tengo esperanzas de cumplir lo que siempre he deseado y no he conseguido en esta.

Aquella vez tuvimos nuestra primera disputa,pero fue la primera entre tantas y tantas,porque no siempre se estaba en común con las ideas de alguien,porque nunca dos personas tendrían un razonamiento total en común por mucho que lleguen a concordar en algo.

...

Fuimos agarrando confianza de una forma paulatina.Un día le acompañaba hasta el portal de su casa,otro le contaba alguna cosa de mí,otro relataba algo de él,y con el paso del tiempo fuimos formando una red de seguridad entre nosotros,que iba protegiéndonos de toda la realidad y situación política y social que nos rodeaba.

-¿Has empezado a escuchar algo sobre el tema de los nazis?-Me pregunto un día de la nada.

No sé porque me incomodó dicha pregunta y quise hacerle cambiar de tema.

-¿No te ha parecido fácil la clase de matemáticas?-Carraspeé.

-Es que no entiendo ese odio que han tomado con los judios,yo,yo...Te lo juro que no lo comprendo.

-Yo no creo que los odien-rasqué mi nuca.

-¿Por qué lo crees?

-Odiar no es mirarles mal,desearles lo peor...Odiar es...Un sentimiento más fuerte que el amor o cualquier otro.Es ver a la otra persona e intentar sacarla de tu cabeza,de esa zona en la que solo lo más horrible de ti reina.Es tratar de sacar la indiferencia a flote pero que esas cadenas de inhumanidad tiren de ti y del otro...
Odiar es de débiles porque solo el que vive con la venganza lo siente.Y bien dicen que a la hora de cobrar venganza se cavan dos tumbas,una para ti y otra para tu enemigo.

-O sea,¿crees que los nazis son débiles?

-No,no,ni mucho menos creo eso pero...

-No hay pero que los respalde cuando ellos son unos simples insensatos que se sienten superiores a otros.

Decidí no responderle,elegí cortar en aquel momento la conversación,porque no sabía en qué punto me encontraba.
Mis padres,socios,conocidos,aristócratas alemanes me contaban cosas,historias sobre los judios y lo repugnantes e inferiores a nosotros que eran,y habían momentos en los que me creía todo eso,pero luego estaba el otro lado de la moneda...El lado el cual representaba Hans,era judió,y los mejores momentos de mi corta existencia los había pasado junto a él...

Intenté sacar aquello los siguientes días de mi cabeza,escogí pensar que todo eso solo serían vanos roces de polémicas...
Pero supe que eso no iba a ser así cuando regresé a mi casa y en el salón general había una reunión de personas.

Entré y saludé a varios integrantes,fui hasta mi madre y le pregunté qué sucedía.

-Hoy oficialmente nuestra familia está integrada en el Partido Nazi,no podíamos pertenecer a él mientras viviamos en Belgica,debemos ser residentes Alemanes para ser miembros activos.