🍒A sus diecinueve años, Momo debería estar apoyando a su banda favorita, yendo a centros comerciales a mirar la ropa de temporada que ha llegado, o estar juntando dinero para su graduación de preparatoria. Pero no, a sus cortos (o largos) diecinuev...
Después del beso Jeongyeon no dijo mucho, nada en realidad. Sólo le había sonreído a medias para Momo, la tomó de la mano y la encaminó a su casa. Para la pelinegra estuvo bien, ese era un pequeño gran avance, sabe que tampoco Jeongyeon va a estar besándola a cada rato. La alfa necesitaba acostumbrarse a la idea de que eran alfa y omega.
Para el miércoles Jeongyeon estaba más pegajosa que nunca. En el receso se pasaba con la cabeza enterrada en su cuello, olfateándola. Gruñía cada vez que alguien le hablaba a la más baja, no importaba si era beta o un omega como ella. Momo no se quejaba, por ella estaba perfecto así.
Ahora están sentadas en las mesas de la cafetería, Sowon también está, porque dijo ahora eran sus nuevas amigas. Jeongyeon no la soportaba, ella era el que más le hablaba a Momo y la estaba provocando.
"Eh, Jeong" Momo acaricia la mejilla de la alfa, llamando su atención, sólo hace que la azabache ronronee "¿Puedes ir a comprarme una malteada?"
"Que vaya Sowon" aspira fuerte.
"Pero no creo que quieras que otro alfa me compre cosas..."
"Está bien" molesta de tener que dejar el calor de la omega, se para, yendo a la caja.
Momo voltea hacia Nayeon, alzando su ceja.
"Es su celo" dice obvia "Se está acercando y ella necesita olerte para que a la hora de, ya sabes, hacerlo, su alfa te reconozca y no te haga daño"
"Oh" asiente en compresión "¿Crees que Jeongyeon lo quiera pasar conmigo?, ¿o llamará a alguien?"
"Pienso que primero te dirá que no porque tendrá miedo de lastimarte. Pero si tu quieres pasarlo con ella y la convences de que no te hará nada... tal vez lo logres"
"Y si no pasa, ¿llamará a alguien?"
Nayeon niega.
"No lo creo" come un chocolate, de esos que Jeongyeon le regaló a Momo, y la pelinegra le da un manotazo "Su alfa se volvería loca de oler a otra omega que no seas tú. Así que, si no eres tú, no es nadie."
Nayeon termina de comer el chocolate y a Momo ya no le importa. Muerde sus uñas, pensando. Que Jeongyeon no llame a nadie más le calmaba un poco, pero sabiendo el dolor que iba a sufrir, la alteraba de nuevo. Tenía que convencerla.
"Toma" la alfa azabache asienta la malteada de vainilla en la mesa, sentándose a su lado y poniendo su cabeza sobre su hombro.
"Gracias, Jeongyeon. ¿Cómo sabías que ésta era mi favorita?"
La alfa gruñe.
"Era la única que había."
Momo se ríe por lo bajo, sabía que era muy bueno para ser verdad.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
