3 parte de los one shots anteriores. (Maquillaje & canción fav) y (Show Secreto)
Mención de SeroMina.
Personajes mayores de edad.
Dynamight
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Kirishima miraba a Dynamight desde abajo, donde el público del rubio se hallaba gritando, empujando y divirtiéndose.
Él incluido.
Era genial cuando la madre del cenizo dejaba que los del "equipo Dynamight" o "extras" que más cercanía tenían con el cenizo se juntaran con la multitud del público, dándoles un merecido "descanso" o mejor dicho diversión después de esforzarse en su trabajo, poniendo por el momento a otras personas en su cargo para que el show continúe con normalidad y ellos puedan disfrutar.
—¡Hey, chicos! ¡miren a Kaminari! —gritaba desde su lugar Mina, señalando con su dedo pulcramente esmaltado al chico rubio que era alzado por la multitud y reventaba a risas por sentir muchas manos en su cuerpo. —Tuvo suerte ese idiota —volvió a hablar la de cabello rosa, mirando al chico con las manos en su cintura y una sonrisa.
Mientras que Sero le daba una calada a su cigarrillo y sonreía por su amigo, que alguna vez le dijo que ser cargado por una multitud era unos de sus sueños frustrados. —Hay que dejarlo ser.
Mina asintió y empezó a corear la canción de Bakugo a todo pulmón, con una de sus manos cercana a su boca y su otra extremidad extendida arriba, en puño, con una sonrisa ladina en el rostro, presenciada por Hanta que se le fue contagiada.
Amigo, ya basta de eso... Se dijo Sero para sí mismo. Estaba frustrado consigo mismo por no ser capaz de acercarse a Mina y pedirle una cita. Son amigos, así como de todo el grupo del "Bakusquad" pero jamás han estado ellos solos platicando como tanto espera "algún día" tener.
Su cerebro se ilumina, tomó coraje y palmeó sus mejillas, tocando con desconcierto el hombro descubierto de la chica rosa.
—Hey, ¿quieres subirte a mis hombros? —sonrió, señalando con su pulgar a él mismo.
Y luego su corazón se alegró más al ver como esta extendió su sonrisa y asintió con un emocionado sí.
Todo presenciado por Eijiro, que miraba a Sero con sorpresa y duda, regalándole Hanta una sonrisa nerviosa, sosteniendo las piernas de la rosada que gritaba y se movía demasiado, tambaleando al flaco debajo de ella.
Ellos hacían buena pareja, y todos los del "equipo Dynamight" lo sabían.
