Capítulo XXI

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Un mes después…

El sol aún no salía por el horizonte, pero las personas ya salían de sus hogares para ir a trabajar o abrir sus tiendas.

Aunque otros salen para hacer ejercicio. Un ejemplo de ellos es Tenya Iida, quien desde hace unos minutos inició su carrera matutina alrededor de la UA.

Sin saberlo, no vio a Izuku Midoriya correr hacia él a gran velocidad. Parece que también está empezando su ejercicio matutino.

Midoriya: Buenos días, Iida-kun — dijo pasando a la izquierda de la Iida — Por cierto, a tu izquierda.

Iida: Buenos días, Midoriya-kun — devolvió el saludo cuando lo vio irse.

Unos minutos, después mientras Iida corría detrás de la academia, Izuku volvió a aparecer detrás de él, corriendo sin verse cansado.

Midoriya: A tu izquierda — avisó mientras lo volvía a rebasar.

Iida: Ja. A mi izquierda. Ya entendí — dijo con sarcasmo.

Varios minutos después, Iida siguió corriendo pero ya algo cansado. En eso, escuchó pasos acercándose detrás de él. Al darle una leve mirada hacia atrás, vio a Midoriya correr hacia él con una leve sonrisa burlona en su rostro.

Iida: ¡No lo digas! ¡Ni se te ocurra! — suplicó, pero era demasiado tarde.

Midoriya: A tu izquierda.

Iida: ¡¡OH, VAMOS…!! — exclamó exasperado.

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Tras correr por media hora, Iida estaba sentado con la espalda apoyado en un árbol. Sudaba como loco al intentar alcanzar a Midoriya, pero por alguna razón no pudo alcanzarlo.

En eso, Midoriya se acercó a él. Su ropa de ejercicio ni siquiera mostraba signos de sudor. Es más, ni siquiera estaba cansado en absoluto.

Midoriya: ¿Llamo a un doctor? — preguntó burlón.

Iida: Necesito pulmones nuevos — dijo respirando pesadamente — Oye, corriste no sé cuántos kilómetros en 30 minutos.

Midoriya: Sí, es que salí tarde — dijo rascándose detrás de la cabeza.

Iida: ¿En serio? Es una vergüenza de tu parte como estudiante a héroe, ¿sabías? — preguntó moviendo su brazo — Ahora tendrás que dar otra vuelta — miró al suelo mientras recuperaba el aliento — ¿Ya la diste? Seguramente ya la diste.

Midoriya: Jejeje — rió tímidamente.

Iida: ¿Cómo es que corriste más rápido que yo, Midoriya-kun? — preguntó extrañado — Yo soy el velocista y ni siquiera usaste tu quirk.

Midoriya: No lo sé. Desde hace un mes, me sentí más motivado a seguir con mis sueños de ser un héroe y… me sentí más libre.

Iida: En eso tienes razón. Ahora eres menos tímido y haces bromas muy seguido. Es como si tu relación con Uraraka-kun te hizo una nueva persona.

Midoriya: Jejeje, creo que eso es cierto — sus mejillas se volvieron rojas — Cuando estoy con ella, siento que puedo hacer cualquier cosa, ¿sabes?

Iida: Ya veo. Dime, ¿han planeado ser una pareja de héroes? — preguntó con curiosidad.

Midoriya: Sí. Uraraka-san y yo hemos hablado sobre ello hace unos días — dijo sonando emocionado — Nunca antes un grupo ha llegado al top 10 de héroes, pero nosotros queremos ser los primeros.

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