Techno y Quackity se odiaban, Quackity vivió durante años soportando las palabras del pelirosa llenas de soberbia, haciéndole saber que siempre sería mejor que el, y Quackity siendo alguien sediento de poder no se dejaría, vivió luchando contra Techno.
pero su ira aumentó desde aquel día que con tan sólo un pico Techno marcó su rostro con aquella cicatriz que atravesaba su ojo, fue su primer derrota, Techno podría haber ganado la batalla ese día pero Quackity estaba decidido que ganaría la guerra contra el pelirosa.
-¿Crees que la muerte es un impedimento para mí? - hablaba el de la mascara de cerdo viendo al pelinegro que jugaba con aquella ficha en sus manos, el del gorro sonrió por lo bajo, lanzó la ficha a las manos de Techno, este pudo ver la sonrisa grabada en la ficha - Eres muy poca cosa para terminar conmigo, Quackity, así que aléjate de Olivia
-Y si no lo hago, que? - hablo con una sonrisa el pelinegro - Dejaras otra marca sobre mi piel? - empezó a reírse en la cara del pelirosa, Techno era alguien que amaba la violencia, que en su interior una pequeña voz le gritaba que matara e hiciera que corriera sangre, pero trataba de mantener la postura por su propio bien - Ella...es un dulce que quiero probar
-Enserio crees que alguien como Olivia se fijaría en ti? Eres arrogante y soberbio, Por dios Quackity, tan solo mirate - hablo Techno soltando una risa, provocando que la Ira en el pelinegro creciera - Nunca, ni con un ejercito podrías derrotarme
-Technoblade - Quackity tomó su espada poniéndola cerca del cuello del pelirosa, sonrió dándole una calada a su cigarrillo- sólo un emperador cede ante la emperatriz, creeme que Olivia será la emperatriz de mi reino y el día que lo haga te prometo que te matare, esta espada atravesará tu pecho haciendo que nunca más veas la luz del día
Quackity hablaba con seguridad, había cometido muchos errores en su pasado, errores que no volvería a cometer, aprendiendo de ellos a no confiar, en hacer lo que fuera necesario para su propio bien, en nunca flaquear y estar seguro de sí mismo.
Mientras que Technoblade nunca había escuchado así de seguro al pelinegro, no tenía miedo, miedo era lo último que sentía, pero en esos momentos nisiquiera se le podía ocurrir como acercarse a la castaña para poder alejarla de Quackity, como lo haría si el fue quien se comportó déspoto desde un principio con la más baja.
El del gorro bajó la espalda y se dio la vuelta sin decir una palabra más, mientras que el regresaba a su hogar Technoblade regresaba a la colina vigilando el hogar de aquella chica que había robado parte de sus pensamientos.
Pero estaban tan distraídos que ninguno se dio cuenta que Olivia había salido de su pequeño hogar para ir a Kinoko Kigdom pues Tina la había invitado a una pequeña fiesta de bienvenida donde también estarían presentes Dream, Fundy, Tubbo, Ranboo, Purpled entre otros más.
Technoblade entró a la casa de la castaña cuando no obtuvo respuesta de ella al tocar su puerta, se dio cuenta que no había nadie, inspeccionó el lugar y en su campo de vista una invitación, la tomó en sus manos leyendo, rápidamente salió del lugar, se monto en su caballo y se dirigió a Kinoko, sin pensar que aquel pelinegro consumido por el odio y venganza se aprovecharía de su ausencia.
Quackity sacó el mechero de su bolsillo y admiro la hermosa cabaña que su enamorada había construido con tanto esfuerzo, prendió el mechero y lo boto contra la madera haciendo que la llamas se dejaran ver rápidamente, a veces en la vida tenemos que hacer cosas arriesgadas para conseguir lo que queremos, y era justo lo que Quackity hacia, quien sería el hombro de consuelo para Olivia? El por supuesto, quien le ofrecería posada en su elegante país? El, no había fallas en su plan, nadie se interpondrá ante el.
ESTÁS LEYENDO
Las Nevadas (En Edición)
FanfictionOlivia, una chica recién llegada al DSMP haría todo un caos por el lugar, llamando la atención de varios y uniéndose a quien menos esperarían, pudiendo haber escrito una historia, teniendo la oportunidad de poder vivir su vida tranquilamente, pero a...