Si hay algo que a México le encanta es esquiar con el americano, en cualquier temporada.
Pueden pasar horas en el centro de esquí practicando vueltas o haciendo sus propias piezas de baile, buscando siempre la manera de divertirse y poder pasar un rato agradable juntos, aunque lo hace más por él mismo. Solían ir al mismo lugar incluso antes de ser pareja, pero eso nunca significó demasiado para el mexicano.