Los chicos de Why don't we buscaban un cuerpo de baile para sus próximos conciertos.
Mae trabajaba en esa industria mientras estudiaba.
Ashley le recomendó a Corbyn que investigara sobre la bailarina.
¿Qué pasa si Corbyn se enamora de ella?
#1corbyn...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
POV Marina
— Entonces... ¿Queréis iros a vivir juntos...?— preguntó Lauren, mientras cortaba frutas para dárselas a Lavvie de postre.
— Sí... Al menos, eso hablamos el otro día...— respondí.
— ¿No es un poco precipitado?— preguntó Carol.
Me encogí de hombros.
— Ya están comprometidos, más vale que empiecen a convivir más antes de casarse, no vaya a ser que se arrepientan luego.— comentó Claire.
— No creo que me arrepienta, sinceramente.— Le dije, con una media sonrisa dibujada en mi rostro.
Levanté la mirada para ver a los chicos con Lavvie en la piscina, nosotras también vamos con nuestros bikinis.
Yo llevo un bikini con la parte de arriba de triángulo y braga brasileña color rojo, ahora mismo llevo unas chanclas ya que estamos en la cocina.
Los demás no nos han podido acompañar en esta velada. Javi y Alex están en una cita, Val y Armin están en Alemania, Ian ha ido a conocer a los padres de Kaede y los gemelos han llevado a Zoe a Italia para que conozca a sus padres.
Por lo tanto, sólo estamos los chicos, Enya, Claire, Lau, Carol, Lavvie y yo.
— Esto ya está.— dijo Lauren.
— ¿Está bien cortada?— preguntó Enya.
— Sí, creo que sí.— contestó Lauren.
— Esperemos que sí.— añadió Carol.
Las cinco salimos de la cocina y caminamos hacia la piscina.
— Lavvie ven, tengo tu fruta.— La llamó Lauren.
Jack ayudó a la pequeña a salir de la piscina. Una vez fuera, Jonah le quitó los manguitos para que estuviera cómoda a la hora de comer.
Ví como Enya se agachaba para coger la toalla de Lavvie, para luego envolverla alrededor de la pequeña.
Mientras comía acaricié su pelo.
— ¿Tienes frío pequeña Spiderman?— Le pregunté.
— Sí, un poco.— me contestó.
— Espera un momento, ahora vuelvo.— dije mientras me levantaba.
— Ok...— me respondió con su adorable voz.
Fui a mi bolsa y saqué mi toalla, esta es más gruesa que la de Lavvie, así que tendrá menos frío.
— A ver, cámbiate de toalla.— dije y la ayudé a desenvolverse de su toalla y le puse la mía.— ¿Mejor?
— Sí, gracias Tita.— respondió, sí, la pequeña Lavender nos llamaba a todas Titas y a los chicos Titos, bueno, menos a Jack y Lauren, que les decía Papi y Lau.
