𝗕𝗨𝗧𝗧𝗘𝗥𝗙𝗟𝗬,,𝗷𝗮𝗺𝗲𝘀 𝗽𝗼𝘁𝘁𝗲𝗿

Chapter Five.

Oh oh oh oh, que bonito tu..

Vacaciones, Casa Potter.

El tapiz todo pintado de colores raros, un escritorio desordenado al igual que la cama, las zapatillas y zapatos en cualquier lado menos en el ropero, en la estantería una colección de autos y soldados, se trataba de la habitación de James.

En la silla del escritorio se encontraba el, con una guitarra, su mirada en las cuerdas concentrado, sin percatar a la pelirroja en el marco de la puerta.

Sirius también estaba allí, acostado en la cama, con las piernas apoyadas en la pared con una trompeta haciendo cualquier melodía pero siempre siguiendo la de James.

— Que toda tu mirada me demuestre tu amor..— canto James mientras Sirius aplaudía lentamente, ambos concentrados.— Desnudar tu alma y dedicarle una canción...— ambos empezaron a tocar los instrumentos, James tarareaba la melodía de una forma suave, Sirius estaba casi morado, parece que no tomaba aire al tocar la trompeta.

Vanny se acercó cuando Sirius empezó a toser sin parar.— ¿Estás bien?— pregunto la pelirroja preocupada.

— Tranquila, se me olvidó respirar.— le guiño un ojo antes de salir corriendo de la habitación.

— ¿Hace cuánto estabas aquí? — pregunto James a espaldas de Vanny , ella no quería dar la vuelta.

—  Que toda tu mirada me demuestre tu amor..— susurro.

—  Entonces ¿Por qué no te das vuelta y me lo demuestras? — Vanny se dió vuelta lentamente con la mirada en el suelo, subió la mirada lentamente a James con una sonrisa tímida. La mirada de James era intensa y llena de amor que te hacía sentir pequeño, los ojos de Vanny recorrieron cada facción de James, sus cejas que estaban arregladas gracias a ella, de otra manera se encontrarían igual al cabello que prefería ni verlo, sus bellos ojos, Avellanas, que muchas veces la hacían perderse cuando llegó a sus labios se detuvo, James se estaba acercando a ella.— Solo dime que si..y te prometo bajarte la luna si me lo pides..— susurro a centímetros de distancia.

— ....S..— Vanny fue interrumpida por Sirius.

— A comer tortolos, a menos que se quieran comer entre ustedes.— Vanny rodó los ojos antes de salir de la habitación, probablemente hubieran pasado muchas cosas si Sirius no los interrumpía, pero no lo sabría a menos que estuviera con James completamente solos sin un perro molesto que interrumpa cada segundo.

Tampoco estaba enojada con Sirius por interrumpirlos, o tal vez si, solo tenía ganas de tirarle una sartén por la cabeza o un expelliarmus tan fuerte que salga volando.