EL NOVIO DE MAMÁ II

Condiciones y Celos

Un nuevo día comenzaba, Dazai era el tutor de la clase de Ryūnosuke al mismo tiempo que su profesor de Química. Estaría dando la primera clase del día y estaba por presentar al nuevo alumno frente a todos.

Un joven de cabellera gris, ojos bicolor, y con una apariencia fina y delicada, entró al salón, situándose frente a la pizarra junto al maestro.

Llevaba su uniforme bien planchado y limpio, y sostenía su mochila.

— Buenos días a todos, niños. Les pido que me regalen su atención un momento. Hoy es un día especial. Tenemos un nuevo compañero en la clase. Atsushi-kun, por favor, preséntate.

El albino sonrió tímidamente y caminó más hacia el centro.

— Y-Yo... Me llamo Atsushi Nakajima, tengo dieciséis años, mi comida favorita es el Chazuke y mi animal favorito es el tigre. Mucho gusto.

Hizo una reverencia tradicional, para luego mirar a su profesor y esperar el lugar en el que debía sentarse.

— Espero que Atsushi-kun y todos aquí sean buenos amigos. Atsushi-kun, va a sentarte en aquel pupitre de atrás. Estoy feliz de tener un nuevo alumno en mi clase.

Indicó.

Atsushi caminó por el medio de dos filas de pupitres hasta llegar al suyo. Su fobia social no ayudaba mucho, pero logró llegar a su lugar. A su lado, Ryūnosuke callado, mirándolo sin decir nada.

— ¿H-Hola?

Saludó tímido. El azabache frunció el ceño, sin responder de inmediato. Tardó unos segundos para que mencionara palabras.

— El sensei definitivamente no está feliz de tenerte aquí. Ayer estaba conmigo y con mamá cuando se enteró de que tú venías hoy. ¿Sabes lo difícil que fue para el sensei preparar tu bienvenida de una noche para la mañana siguiente? Tuvo que ir a comprar bocadillos que más tarde nos dará a todos. Eres inoportuno, una molestia, nuevo.

Atsushi se sintió mal ante esto. Estaba triste, no había sido aceptado por su vecino de pupitre y eso le preocupaba. Él en verdad quería llevarse bien con todos en su nueva escuela. ¿Qué le diría a sus padres cuando les ha prometido tener buenos amigos?

— ¡L-Lo siento mucho, no fue mi intención! Yo no...

En ese momento, médicos y enfermeras de condiciones, entraron al salón de clases para trasladar a los alumnos hacia el laboratorio escolar, donde procederían a realizar las pruebas.

🌌🌌🌌

Salían uno a uno con sus resultados. Había Omegas felices, chicos contentos de que en el futuro serían madres.

Alfas alegres por su condición; Betas satisfechos con la suya.

Lo más triste que podía suceder en esos días de exámenes de condiciones, era ver sufrir y llorar a los jóvenes que habían resultado Omegas y no estaban conformes con eso. O en general, que estuvieran inconformes con cualquiera de las condiciones.

Ryūnosuke sostenía sus papeles con los resultados. Se encontraba sentado en las escaleras que daban al laboratorio, solo, pensativo. Sus lágrimas empezaron a salir, hasta que un nuevo mensaje llegó a su teléfono celular.

"Dice mi mamá que vengas a recogerme a la escuela cuando salgas de clases, y que me vaya a casa de ustedes. Él tuvo que salir de la ciudad y llegará mañana".

Gin.

— Gin es bastante molesta. No sé porqué el tío Ryuma tuvo a Gin si pensaba pasar su vida fuera de la ciudad. ¿Qué hay del tío Fyodor? Él también puede cuidarla.

Ryūnosuke cerró su celular, y volvió a leer los resultados, queriendo haber leído mal a la primera. Ahí estaban esas horribles cinco letras.

— Esto es una maldición para mí, no lo merezco... Los de condición fuerte me aplastarán, y odio ser débil.

Atsushi había estado escuchando lo último. Tomó asiento al lado de Ryū, sosteniendo sus papeles, y le sonrió.

— ¿Tú eres débil? Pareces alguien a quien deba temerle.

El azabache no contestó nada. Echó un pequeño vistazo a las hojas de Atsushi, cuatro letras que quería ver en sus hojas.

— Tú eres tan extraño. ¿En verdad eres un Alfa?

— Eso es lo que ellos dicen. Mamá me dijo, que si soy un Alfa, lo cuidara de los Alfas malos y agresivos que pudiera haber en el mundo, y que cuidara de los Omegas.

Respondió serio. Ryūnosuke seguía decepcionado.

— Los Omegas NO necesitan ser cuidados. Así que métete en tus asuntos.

— ¿Perdón? ¿T-Te ofendí antes?

— Me voy.

En este fic, más que Celo de Omega habrá Celos de Omega. XD

Quién es la mamá se Atsushi?? Es un Omega.