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Titulo: No es mio.
Personaje: Sarah.
Advertencias: Abusos fisicos y psicologicos. Tal vez triste.
Sonrió contenta al ver las dos rayas de la prueba y la abrazó dando saltos de alegría, salió corriendo del baño topandose con Rebekah y Hayley sin dar explicaciones de nada, las abrazó y se fue corriendo en busca de Kol.
—¡Kol!— grito al encontrarlo en el despacho de Elijah, bebiendo.
Kol se dio la vuelta con una sonrisa al escuchar la voz de su amada y se sorprendió cuando ella saltó a sus brazos sin previo aviso y lo abrazo por el cuello enrollando sus piernas en su cintura, el pequeño de los Mikaelson no se lo esperaba pero aun así la abrazo por la cintura dando una pequeña vuelta en su eje.
—¿A qué viene este entusiasmo pequeña?— Preguntó Kol escondiendo la cabeza en el cuello de la chica aspirando su aroma.
Sarah no dijo nada, solo se bajo de golpe de los brazos de Kol y empezó a dar pequeños saltos por su emoción, al ver la cara de impaciencia de su amado llevó la mano a su bolsillo trasero y de hay saco la prueba. La chica entusiasmada cogió la mano de Kol y la puso en la palma de su mano, Kol con una sonrisa miro su palma, pero al ver lo que había frunció el ceño con una mueca de enfado.
El chico no dejaba de mirar su palma buscando una explicación lógica para que la prueba haya dado positivo. Pensó y pensó, pero solo le vino a la cabeza la palabra infidelidad haciendo que se enfureciera más por dentro, era imposible, él era vampiro y ellos no pueden procrear.
—¿Qué es esto?— preguntó Kol dándose a si mismo las esperanzas de que fuera una broma pesada.
—¿No lo ves? — preguntó aún con una sonrisa Sarah —Es una prueba de embarazo positiva Kol, estoy embaraza.— recalcó ella al darse cuenta de que Kol estaba confundido.
—Es imposible Sarah, tiene que ser una broma— dijo el Mikaelson más para si mismo.
—Cariño, no es ninguna broma — se acerco más a el chico —Por eso las nauseas, el vomito, los antojos, la jaqueca y mi falta de poder — siguió diciendo ahora colocando las manos en las mejillas de Kol —Freya me lo dijo en la mañana con sus poderes, pero quería probarlo con el método mundano.
Kol miró a los ojos a su amada, viendo la sinceridad en ellos y las esperanzas de ser buenos padres, ella veía un futuro en el que él nunca tuvo en cuenta. El menor de los Mikaelson al saber que no podía procrear por ser vampiro le empezó a importar menos tener una familia y cuando conoció a Sarah, esas ideas seguían igual. Él ya sabía que su amada deseaba formar una familia con él, pero Kol nunca quiso tener algo que ver en ello .
—Sarah —dijo Kol serio y quito las manos de ella de su cara —¿Me has sido infiel? —preguntó mirandola a los ojos.
—¿Qué? —preguntó ella sorprendida y agarró con fuerza las manos de Kol —¿Como puedes decir eso? Este bebé es nuestro Kol.
