·Extra·
Al verlos marcharse con esos rostros tan lívidos y ese andar tambaleante, Itachi caminó de regreso, ya había sido suficiente, su hermano estaba más que bien. O al menos algo parecido. Itachi Uchiha recordaba a esa niña, esa niña graciosa de cabello rosado y expresivos ojos verdes. La veía siempre que pasaba por la academia para ver a Sasuke, mientras ella a su vez miraba a su hermano como si fuera la mejor obra de arte. No recordaba su nombre, o quizás nunca lo supo.
Llegaron a investigar Kisame y él a ese lugar por mera curiosidad. Se decía que una enorme fuerza de chakra cubría toda la extensión de ese valle, y era cierto, pudo sentir como su propio chakra emanaba de él y cómo él ambiente seguía recargándolo en un ciclo nunca antes visto. Se decía también de que posiblemente se podrían encontrar unas rarezas de la naturaleza: las flores índigo de montaña. Esas que aumentaban él chakra y las capacidades físicas con tan sólo ingerirlas. Sin embargo eso no fue lo más impresionante de todo. No, desde luego que no lo fue. Lo más impresionante fue encontrar a Kakashi allí y también a su hermano. Sasuke... ¿Cuánto tiempo que no le veía? ¿Unos meses quizá? La última vez le rompió la muñeca y lo sometió a un genjutsu haciéndole revivir toda la masacre de su familia. Sí, Itachi lo aceptaba, era un verdadero cínico.
Cuando se dio cuenta de que no estaban solos en el valle convenció a Kisame de buscar los índigos de montaña más allá de lo que pudiera ver. Y escuchó el nombre de su hermano una y otra vez. «Sasuke», «Sasuke-kun» , «SASUKE» Al parecer se había perdido. Itachi decidió aplicarse un jutsu para ser imperceptible, y para su sorpresa el chakra del lugar lo ayudaba más de lo que podía imaginar. Era invisible.
Y pasado mucho rato lo vio: Sasuke corriendo detrás de esa niña e impidiendo que se lanzara por el precipicio, dejándose golpear por ella y tolerando su llanto. Y entonces lo comprendió: a Sasuke le gustaba esa niña. Así como a él alguna vez le gustó Izumi. A su hermano pequeño le gustaba esa niña de peculiares cabellos rosados como una flor de cerezo «Oh, cierto, ese era su nombre: Sakura» lo recordó:
"— ¿Cómo te fue en la academia, Sasuke?
—Mmm... Hoy una niña de cabello rosado y ojos verdes se acercó a mí. Parecía que iba a decirme algo pero la interrumpí para saber quién era y salió corriendo —Itachi sólo se rió con sutileza—. Pregunté y creo que se llama Sakura, cómo el árbol que florece en primavera"
Pero luego sintió como sí un chakra inmenso ocasionado por el mismo valle en el que se encontraban estuviera abalanzándose hacía ellos. Podía verlo al activar su Sharingan: esa ola inmensa de poder. Con su chakra decidió contraatacar pero ellos se dieron cuenta de ello. Sus cuervos los rodearon para protegerlos de esa cosa que iba hacía ellos y sin embargo... No pudo evitar que esa ola de poder los hiciera caer en un genjutsu. Itachi se sintió frustrado, por primera vez en mucho tiempo sintió una derrota, se sintió inútil. No podía creer que esa fuerza extraña fuera más capaz que el. Unos segundos después sintió una brecha e intentó sacarlos nuevamente del genjutsu pero volvió a ser un fracaso. En eso, unos segundos pasaron y podía observar cómo el cuerpo de ambos acumulaba chakra: estaban intentando liberarse. Cuando lo vio conveniente les dio una pequeña ayuda, una brecha por la cual salir. Y salieron. Lo supo por la forma en que se movían y hablaban.
Con su Sharingan Itachi pudo leer sus labios para comprender lo que se decían a pesar de la lejanía.
— ¿Qué pasa? —dijo su hermanito.
—Antes no lo entendía ¿sabes? Me preguntaba por qué razón eras así. Tan cerrado y apático. Pero supongo que eso te hacía muy intrigante y eso me llamó la atención. Sin embargo, seguía sin conocerte... Realmente no te conocía. Eres demasiado inquietante, pero aún así, todo este tiempo que hemos pasado en equipo... siento que te he conocido más que antes, más que las otras chicas. Pero aún así seguía sin entenderte. Me preguntaba por qué razón hablabas tanto sobre la venganza.
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Brillante Luna Llena
Fanfiction"Después nada se supo del enredo que se suscitó esa noche bajo la luna deslumbrante que iluminó sus gélidos cuerpos que quizás quisiesen un poco de los cálidos deseos del otro" Durante la convalecencia de Kakashi en el hospita...