Vivimos en un mundo hostil donde las palabras sinceras y los sentimientos puros quedan de lado por la avaricia, pero aquí no, al menos en mi mundo no.
Mi nombre es Lisette Andrade, mejor conocida como Luna, soy escritora y defensora de la verdad de...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Detesto a las personas que defienden lo indefendible, aquellos que creen ser perfectos y que todo lo que no encaje en su pensamiento o acción está mal, que nunca aceptarán el hecho de no tener razón o haber perdido una pelea, porque según ellos todo lo que sale de su boca es la total verdad, verso irrefutable, prosa perfecta.
Me dan tanta pena. Desearía que le bajaran al ego, porque sé que debajo de todo ese ego hay una persona bulnerable, que teme a verse en el espejo y notar sus imperfecciones, sus errores y constantes equivociones que es normal que se cometan ya que somos humanos, es parte de nosotros, pero ellos jamás aceptarán eso, seguirán creyéndose una deidad con un juicio incuestionable.
Ojalá se pusieran a ver el valor que tiene el pensamiento de las demás personas, ya que lo que ellos piensan muchas veces es erróneo, que la vida se trata de equivocarse y aprender de ello, de saber ver el punto de vista de los demás sin dejar de ser fiel al tuyo, pero moldeandolo para quisas conseguir el correcto, o los correctos puntos de vista sobre un tema, pero siempre tomando en cuenta que no somos perfectos, nos podemos equivocar y aceptar nuestro error, acción la cual muestra la sabiduría que poseemos.
Pero no importa en qué idioma o como lo explique, esas personas seguirán sosteniendo su opinión como unica correcta aunque muchas veces en su interior sepan que están equivocados, el ego los ciega.
De nuevo, no me mal entiendan, a veces es bueno hacer oídos sordos a lo que digan los demás, porque quisas solo estén dando su opinión solo para hacer daño, la cuestión es la siguiente, si sabes que estás en un error, si en tu corazón sabes con certeza que estás equivocado ¿porqué entonces lo defiendes en vez de aceptar que te equivocaste? Eso es lo que me da rabia, me hierve la sangre el solo pensar que hay personas así.
Tropieza, comete un error, que no te de pena, eso está bien, la cuestión es levantarse y seguir avanzando, no quedarte en ese error apenado por no ser perfecto, ya que eso lo único que hará es consumirte. Sólo deshaste de ese ego y esa soberbia para que sientas al fin lo que es ser feliz.
-Dedicado a Adrián Andrade
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
