Gods

II

QUIÉN ERES

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La nieve cubre su antiguo amor y el viento seca las hojas de la lluvia que una vez fueron lágrimas

— ¿Pero cómo es posible? — suspiró con pesadez de nuevo, ya había perdido la cuenta de cuantas veces lo había hecho, ¿cómo era posible aquello? 

Una tormenta se había levantado y el invierno había vuelto a hacer una de las suyas cubriendo de nuevo todos los prados de nieve, acentuando el frío. 

El fuego en la chimenea de la casa hacía mucho más ruido que las confusas voces del fondo, que discutían sin solución, nadie se lo podía explicar. Era tan difícil comprenderlo para unos simples ignorantes en esos momentos. Porque eso era lo que eran, ignorantes. 

— ¿A mi que me cuentas? — respondió harto de la conversación, no sabía tampoco cuántas veces había respondido en un tono áspero a la discusión, ya que el tampoco se lo explicaba, — Peleamos contra las bestias para salvarlo y resulta que está muerto, pero luego cuando decidimos irnos para luego volver a enterrarlo, me giro y veo al tipo ese de pie, mirando en nuestra dirección y luego ¡plof! al suelo de nuevo, pero esta vez estaba vivo — repitió los hechos de nuevo aquel imponente chico, y optó por estirarse de nuevo y volver a colocarse de buena forma en su sillón. 

— Ya bueno, también no olvidemos el hecho de que las bestias lo perseguían, y que no se os olvide que las hemos matado, seguro que tendremos problemas con su clan de ahora en adelante, — recordó esta vez Wil, quien se había cerciorado antes de revisar de qué clan provenían los bestias, con suerte no tendrían que enfrentarse al más poderoso. — y no, no nos enfrentamos al más fuerte, pero si a uno de los 5 poderosos, ¿me explicais que haremos ahora?  — dijo, separando la vista de aquel libro de especies y su historia. 

— Por ahora esperar, no tenemos otra opción hasta que se despierte — comentó Phil, que salía de la habitación donde recientemente había acabado de curar al chico. Su tono de voz... inquieto...

Sin embargo, la mente de Techno no podía pensar en otra cosa que en ese momento. En la batalla contra las bestias, le dió una mirada a aquel cadáver, y vio cómo le miraba en un breve momento, solo fueron segundos, pero lo vio. Aunque no los vio brillar de la misma forma en que lo hicieron en el momento donde sus miradas se cruzaron antes de que el desconocido se desplomase en el suelo de nuevo, pero esta vez con vida. 

Sus ojos, todo era culpa de sus ojos, esos ojos verdes brillantes que se le hacían familiares, como si los hubiese estado observando desde hace mucho tiempo. Como si su cuerpo se viese aliviado y asustado a la vez bajo la mirada de esos brillantes ojos esmeraldas. Y se sintió terriblemente asustado cuando lo vio caer de nuevo en la fría nieve. A pesar de eso, Technoblade no supo por qué se preocupaba tanto por aquel desconocido tan desmesuradamente familiar.

— Chicos, ha despertado. 

¿Ya?

— ¿Cómo... tan pronto? Sus heridas son mortales todavía no debería de- — Phil calló ante la nueva presencia en la sala, estaba aquel chico Enderman, pero a su lado había un chico que se apoyaba en el marco de la puerta. 

Era la persona más bonita que había visto en su vida, sus cabellos dorados desordenados cayendo sobre su frente cubierta en una venda, sus pecas adornando su fina y perfecta nariz, sus labios fruncidos simulando una mueca de entre miedo y dolor. Y lo que más les atrajo, sus ojos esmeraldas mostrando desconfianza. 

El silencio reinaba la sala y la sumía en un incómodo silencio, que Techno no dudó en responder. 

— ¿Quién eres? — su imponente tono se vio deteriorado al final ante su mirada. Y a pesar de ello el rubio no contestó. 

— ⎅⍀⟒⏃⋔ — dijo, a sabiendas de que los otros no le entendían, Ranboo se giró sorprendido con el ceño fruncido y se introdujo en la tarea de analizarlo con sorpresa. 

Entonces, a pesar de las circunstancias comenzaron a hablar, al principio el desconocido se sorprendió de la misma manera que Ranboo al oírlo hablar, pero luego le siguió la conversación con tranquilidad, sin embargo el desconocido fruncía el ceño, extrañado. 

Hasta que por fin pudieron deleitar con su voz. 

— ¿Cómo comprendes esta lengua? Esta lengua es la más antigua — dijo, esta vez con mucha más desconfianza y comenzando a prepararse para el combate, cambiando su semblante a uno serio. Sus palabras, sin embargo, en vez de sonar desconfiadas sonaron más bien como una amenaza

Y eso no le gustó a sus rescatadores, quienes rápidamente socorrieron a su compañero que sin saberlo estaba en serios aprietos.  A pesar de todo se mantuvo en su posición sin titubear y respondió a su pregunta con precisión. 

— Alguien muy querido para mi me lo enseñó, sin embargo el ya no está entre nosotros — respondió con simpleza, sin embargo el herido no quiso creerle y afianzó su posición de combate. 

Sus ojos cambiaron completamente, y en su rostro apareció una chispa de agresividad. Asustado, desconfiado y adolorido atacó, en una milésima de segundo arremetió sobre Ranboo, a pesar de ir con las manos desnudas y estar herido. Todos temieron, y a muchos les costó reaccionar.  

Entonces, en otra milésima de segundo alguien se interpuso entre el feroz ataque de desconfianza. El choque de sus brazos hizo que una extraña corriente les hiciese dar unos pasos hacia atrás los otros. Ranboo cayó de culo en el suelo dando fuertes bocanadas de aire al haber sentido como su alma se escapaba de su cuerpo.

Ambas miradas chocaron de forma agresiva, los ojos rojos chocaron agresivamente con los ojos esmeraldas, pero entonces y solo entonces los ojos esmeraldas cambiaron y dejaron su agresividad. 

Y unas lágrimas se deslizaron por las mejillas de su atacante.

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