CAPÍTULO 21

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Los nudillos de sus manos se ponían cada vez más  blancos mientras apretaba el volante de su auto con todas sus fuerzas, entre más se iba acercando a la casa de sus padres  su furia aumentaba y su corazón se quebraba mas de lo que ya estaba.
Había salido de la mansión Kanawut sin decir ni una sola palabra, su mente aún no procesaba nada sin embargo quería escuchar de la propia voz de su madre si lo que el estaba creyendo era verdad, tenía la esperanza de que no fuera así, de que fuera una confusión, de que alguien los quiera inculpar, se negaba a creer que su propia madre había sido la culpable de todos esos años de dolor y no solo los de el pues Gulf había sufrido quizás hasta más que el sin embargo lo que más le dolía eran sus hijos, habia perdido tantos años junto a sus hijos, los cuales no iba a poder recuperar.

Ni siquiera se estacionó de la manera correcta, solo dejo el auto y bajo de inmediato, sus hermosos ojos azules reflejaban la furia que estaba conteniendo

-¡Luz! - Gritó en cuanto puso un pie en aquella casa, era la primera vez que llamaba a su madre por su nombre, estaba enojado demasiado enojado
- ¡ Dónde está Luz ! - Le pregunto a una de las empleadas que estaban en la sala de estar 

- En el jardín trasero Joven - Dijo inmediatamente

No espero más y dió la vuelta, queriendo llegar de inmediato al jardín trasero pero antes de  siquiera dar tres pasos su padre se apareció frente a el

-¿Que son todos esos gritos Mew? - Pregunto confundido, pues su hijo no era de llegar gritando

-Ahora no Papá - Dijo retomando su camino al jardín trasero.

Cruzo la gran puerta corrediza de vidrio, llegando hasta donde estaba su madre regando algunas de los Rosales que ese jardín tenía, a puño más su puño dónde tenía con el aquella carta y camino directo hacia ella con zancadas grandes

-Hijo- Exclamó feliz al verlo

-Luz- respondió con mucha pesados y aguantando las ganas de gritarle después de todo era su madre

- ¿Que te pasa? ¿Porque me llamas así ? - pregunto pero a la misma vez reclamo tal cosa, pues su hijo jamás le había llamado por su nombre, estaba segura de que algo había sucedido para que estuviera así de enojado ¡ Porque claro! Era su hijo, lo conocía muy bien para saber que cuando frunce el entrecejo y apuña sus manos era porque estaba conteniendo su furia

- Mew - Eriol hablo detrás de el - ¿Porque le llamas así, es tu Madre -  reclamo el mayor

- Explícame esto - Ignoró a su padre y le hablo a su madre con voz dura entregándole la carta arrugada que traía en sus manos

La tomo con manos temblorosas, tenía una idea de lo que era aquel papel y no se equivocó al desdoblar aquella carta que ella había escrito hace más de 10 años, no hizo falta leerlo pues sabía muy bien cada palabra que estaba escrito ahí

- Dime que no fuiste tú - Hablo con voz ronca producto del nudo que se estaba formando en su garganta  - ¡Habla! - Volvió a decir con voz más fuerte al ver que su madre no emitía ningún sonido

-¡Mew! - Reprendió su padre, el cual no tenía idea de que estába pasando - No le hables así, es tu madre -

-Pues quiero saber si “ Mi Madre”- enfatizó lo último
- Es la responsable de que Gulf me odie - soltó

-De que estás hablando- confundido pregunto Eriol, regreso haber a su esposa que se mantenía con la mirada en el suelo - Luz, ¿Que es lo que quiere decir Mew ? -

- ¡ Por dios Habla! - volvió a gritar ya enfadado, quería respuestas y su madre no se las daba, entonces entendió que su silencio decía todo.
El que calla otorga, le había dicho una vez su padre

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