Tododeku Week 2022 || BNHA

Día 7. Luz

Estaba cansado, demasiado. ¿Cómo no lo estaría, si acababa de enfrentar, posiblemente, el mayor reto de todos los que ha experimentado en su camino para convertirse en un héroe?

Luchar contra Flect Turn, y todo ese séquito de hombres que lo seguían bajo el nombre de Humarise, teniendo en contra al mismo tiempo por las bombas que el tipo había colocado oculto bajo las sombras, estuvo a punto de cobrarse la vida de miles de personas, sin mentir.

De no ser por Izuku, quien logró llegar a tiempo para detenerlo, no sabe en qué situación se encontrarían en ese momento.

Una catastrófica, posiblemente.

Shoto no podría explicar con exactitud el pánico que lo heló de pies a cabeza y lo hizo correr en dirección al peliverde tan rápido como su agotado cuerpo se lo permitiese, tras ver a su novio lleno de heridas y sangre embarrada por todo el traje.

Apenas lo tuvo enfrente suyo, lo estrechó entre sus brazos con la mayor delicadeza posible, temiendo causarle un mayor daño con cualquier movimiento demasiado brusco de su parte. El agarre fue correspondido casi al instante, con una efusividad que solo podría pertenecerle a su Izuku, y solo entonces, su corazón normalizó el ritmo de sus latidos —que antes golpeaban su pecho desenfrenados por el temor—, y pudo respirar con tranquilidad.

Estaban bien. Ambos se encontraban bien. Estaban juntos, y todo había terminado.

—No estoy seguro de quién me terminará matando primero, si los villanos, o tú de un susto —murmuró el chico de hebras bicolores, tirando suavemente de la pecosa mejilla a modo de reproche.

Parecía broma, pero lo decía completamente en serio. Izuku podía ser la luz que iluminara cada rincón de su vida y le mostrase las maravillas del mundo, de las que se había privado hasta antes de conocerlo; como el responsable de los mini infartos que sufría el pobre Shoto con mucha mayor frecuencia de la que le gustaría.

—No digas eso ni de broma —reprochó el ojiverde, alejándose un par de centímetros del cuerpo después su pareja para que pudiese verlo al rostro, abultando el labio inferior—. Y eso es mentira, estás exagerando.

—¿Lo hago? —el tono lleno de ironía de Todoroki, causó que el mohín en los labios de Midoriya se marcase aún más—. Primero, te desapareces completamente. Luego, te veo en las noticias, siendo buscado como un asesino en masa. Después, me mandas solo una señal de vida codificada, como ya es tu costumbre. Y cuando por fin te encuentro, tenemos que ir directamente a pelear, te pierdo de vista un rato y ahora estás lleno de heridas. ¿Continúo?

—¡No, ya, está bien, lo admito, perdón! —la voz de Izuku sonó nasal al momento de pedir disculpas, suplicando por obtener el perdón internamente lo más pronto posible, pues conforme el heterocromático iba enumerando su lista de pequeños detalles, este le apresó la nariz entre sus dedos a forma de reproche—. No lo vuelvo a hacer, ¡lo prometo!