SOY TU CITA|• KOOKMIN

Capítulo 5

Jimin se recostó en el sofá, con las piernas cruzadas y una expresión de desdén en su rostro.

— Entonces…eres un fracasado — asintió con la cabeza, sin dejar de mirarlo.

Jungkook se acomodó en el sillón frente a él, con un gesto de fastidio.

— ¡Oye! No soy un fracasado — replicó, defendiéndose.

Jimin arqueó una ceja, con una sonrisa traviesa que le hizo sentir un cosquilleo en el estómago a Jungkook.

— Trabajas como prostituto — le recordó, con una voz suave pero irónica.

— Ser prostituto no es una ofensa, si crees que me importa que me llames así, es… algo que realmente no me interesa a decir verdad — murmuró Jungkook, con una seguridad que le sorprendió a Jimin — En fin, no soy eso, solo trabajo como acompañante.

— Qué es lo mismo que ser un… — intentó decir Jimin, pero Jungkook lo interrumpió.

— ¡No lo es! — negó de inmediato, con un tono de voz más alto. — No tenemos sexo a cambio de dinero, solo estamos allí para acompañar a las personas y ya.

Jimin se rió suavemente, sin dejar de mirarlo fijamente.

— Di la verdad, ¿con cuántas de ellas has dormido? — preguntó, con una sonrisa maliciosa.

Jungkook frunció el ceño, sintiéndose atrapado.

— No muchas, pero… ¡ese no es el punto! — replicó, con un tono de frustración.

Jimin se levantó del sofá y se acercó a él, con pasos lentos y seguros.

— ¿Te lo deletreo? — dijo, con una sonrisa malvada.

Jungkook se sintió acorralado, sin saber qué decir.

— El sexo es sexo Park — se encogió de hombros, con una expresión de resignación — Cuando sientes la necesidad no puedes evitarlo, es algo común entre los seres humanos, además…eran solteras y se insinuaron ¿cómo podría rechazar eso?

Jimin se sentó en el borde del sillón, con las piernas cruzadas y una mirada penetrante.

— Con un "Solo hago esto por trabajo, no cojo con cualquiera" o quizás un "me pagarás el doble verdad" — sonrió, con un tono de burla — Si vas a hacer algo tan bajo, al menos asegúrate de llenar tus bolsillos, sé inteligente hombre.

Jungkook se sintió incómodo, con la mirada de Jimin clavada en él.

— ¿Por qué pareciera que jamás has tenido sexo? — lo observó, con una expresión de curiosidad.

Jimin se encogió de hombros, con una expresión de indiferencia.

— No lo sé, jamás he sentido esa necesidad, considero al sexo algo innecesario y tonto — confesó, con una voz tranquila. — Eso del apareamiento humano no es algo que me interese a decir verdad ¿En qué me beneficia?

Jungkook se sintió intrigado, con la respuesta de Jimin.

— ¿En muchas cosas? — sonrió, con un tono de picardía. — ¿Quieres saberlas?

Jimin lo miró con una expresión de desdén.

— No, no me interesan, volvamos a tu fracaso de vida, es más interesante — le sonrió, con un tono de sarcasmo.

Jungkook sintió la necesidad de estrangularlo con sus propias manos.

— Esto no va a funcionar Peter — dijo al fin, con un tono de resignación.

Jimin se levantó del sillón y se acercó a él, con una mirada de confianza.

— Confía en mí cabeza hueca que se prostituye gratis, soy más inteligente que tú — asintió, con una sonrisa de superioridad — Funcionará, no será por mucho tiempo y podremos manejarlo…solo tenemos que conocernos más.

Jungkook se sintió aún más frustrado, con la actitud de Jimin.

— Bien ¿Qué te gusta? — preguntó, con un tono de resignación.

Jimin se sentó en el sofá, con una expresión de orgullo.

— Todo en lo que soy bueno — asintió, con una sonrisa de satisfacción. — También me gusta tener la razón…siempre la tengo, soy lo máximo, haga lo que haga, te sorprenderás ya que no hay nadie como yo en toooodo el mundo así que siéntete orgulloso de ser el novio falso de esta persona inteligente, amable, guapa, humilde, servicial y…

— Me gusta la música — interrumpió Jungkook, con un tono de desesperación.

Sabía que si no lo interrumpía, Jimin seguiría hablando y hablando sin parar.

— Toco la guitarra y el piano, también me gusta pintar, trabajo en una tienda de tatuajes los fines de semana, estoy estudiando diseño gráfico y hago el trabajo de acompañante en mi tiempo libre, tengo un hermano mayor llamado Zhan y una hermana menor llamada Soyeon, tiene tres años.

Jimin  se quedó atónito, con la cantidad de información que le había dado.

— Vaya biografía — silbó, con un tono de incredulidad.

La conversación entre Jimin y Jungkook se vio interrumpida por una voz que resonó desde la entrada.

— Jimin, ¿estás en casa? — la voz era suave y familiar, y los ojos de Jimin brillaron al escucharla.

— ¡Sí! — respondió con entusiasmo, mientras Jungkook se giraba para ver quién era.

Un hombre alto y apuesto, con el pelo negro azabache y unos ojos que parecían penetrar el alma, entró en la sala.

— ¿Y este quién es? — señaló a Jungkook con una ceja alzada, mientras Jimin se ponía de pie con una sonrisa nerviosa.

— Es Juan, mi novio — respondió Jimin, con una sonrisa que no llegaba a sus ojos.

— Jungkook, un gusto — saludó el hombre, extendiendo la mano.

Jungkook la estrechó con cautela, sintiendo una punzada de incomodidad.

— ¿No que eras Juan? — lo miró fijamente el hombre, con una expresión que no dejaba lugar a dudas.

— Le digo así de cariño — respondió Jimin, con una sonrisa inocente — ¡Él me dice Peter Hyung! — agregó con alegría, como si estuviera orgulloso de ese apodo.

Jungkook lo miró incrédulo. Hace unas horas lo regañaba por llamarlo así y ahora le contaba a este chico con emoción, como si ese apodo le hubiera gustado desde un principio.

— Ah, ¿en verdad juegas así hermanito? — sonrió de lado el hombre, con una mirada penetrante. — Soy Yibo, Wang Yibo, el hermano de Jimin — se presentó, tomando asiento frente a ellos.

Jungkook asintió, reprimiendo su emoción y su lado de fanboy para luego mirar a Jimin.

— ¿Qué quieres? — reguntó Jimin a su hermano, quien lo observaba fijamente.

— La verdad — suspiró Yibo, con un tono de voz que dejaba entrever su desconfianza.

— Ya te la dije hermano mayor — sonrió Jimin, con una expresión de inocencia fingida.

— Park… — sonrió de lado Yibo, con una mirada que no dejaba lugar a dudas.

— Esa es la verdad hermano, lo juro — dijo Jimin, con un enorme puchero en sus labios.

— ¿Cuánto te pagó? — Yibo miró a Jungkook, con una expresión de curiosidad — Vamos, no seas tímido, solo dilo.

Jimin intentó intervenir en eso.

— Hermano mayor, ¿cómo puedes pensar así de mí? Tu inocente hermanito jamás haría algo como es… —

— Me compró todo un equipo de sonido y una guitarra electrónica — confesó Jungkook, con un tono de voz que transmitía su vergüenza.

— ¡Juan! — chilló Jimin, con una expresión de horror.

— Soy Jungkook — corrigió este, con un tono de voz que transmitía su frustración.

— Hermano mayor, ¿cómo lo supiste? — preguntó Jimin, con una expresión de incredulidad.

Yibo rió negando con su cabeza.

— En primer lugar, evitaste el contacto visual conmigo desde que llegué, lo que es extraño. También me llamas "Hermano mayor" cada vez que te sientes culpable, más aún cuando mientes — le recordó Yibo, con un tono de voz que transmitía su conocimiento acerca de su hermano.

Jimin se avergonzó ante el hecho de que su hermano lo conociera tan bien.

— ¿Entonces… en él gastaste tu dinero? — preguntó Yibo, con un tono de voz que transmitía su decepción.

Jimin asintió con su cabeza, con una expresión de resignación.

— ¡Me humillaron Hyung, tenía que hacer algo para cerrar sus bocas! — Dijo con su puño en alto, una expresión de indignación. — ¡Ellos piensan que seré un viejo soltero, con estilo y hermoso, pero soltero y amargado! Dijeron que nadie soportaría estar conmigo Hyung…

— Y es verdad… — murmuró por lo bajo Yibo, con un tono de voz que transmitía su acuerdo.

— ¿De qué lado estás? — frunció su ceño Jimin, con una expresión de enfado.

Jungkook miró a Yibo, con la esperanza de que el mayor pudiera hacer entrar en razón a Jimin. Quizás podría librarse de todo eso con su ayuda. Wang parecía ser un hombre inteligente, sensato, brillante y…

— Del tuyo Minie, te eduque como un ganador — habló Yibo, buscando trasmitir su apoyo — Pudiste decirme y conseguía a un modelo o algo así… ya sabes.

— Seh, bueno, quise hacerlo por mi cuenta… — sonrió tiernamente Jimin, con una expresión de orgullo.

— Me enorgulleces — le sonrió Yibo, con una expresión de afecto.

— Estoy perdido — murmuró por lo bajo Jungkook, con una expresión de desesperación.

.

.

.

✨🙃