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-¿Qué dices? ¿Aceptas o no?-Preguntó un pelirrojo con ojos verdes a través de su teléfono celular hacia su mejor amigo

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-¿Qué dices? ¿Aceptas o no?-Preguntó un pelirrojo con ojos verdes a través de su teléfono celular hacia su mejor amigo.

-Supongo que la idea me gusta, podríamos pasar mas tiempo juntos... Está bien, pero tendrás que darme tiempo para empacar y poder proteger mi equipo.-Dijo el de ojo marrones.

-Vale, tal vez pueda ir a tu casa y ayudarte.

-Puedes venir, pero eso lo haríamos mañana, o bueno, más tarde, porque, tío, son las dos de la madrugada, loco.-Rió risueño el menor.

-Hey, no séas así, me encanta llamarte en la madrugada y cómo me insultas porque toda tu familia está durmiendo.-Rió recordando todas las veces que llamó en la madrugada a su mejor amigo y cómo el último lo insultaba varias veces, pero al final ambos se quedaban hablando de estupideces hasta que se quedaran dormidos.-Me da mil años de vida.

-Bueno... Me gusta que me llames en la madrugada, pero ya me dio sueño, adiós, imbécil.

-Adiós, idiota~

-Sólo hace falta empacar los mangas

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-Sólo hace falta empacar los mangas.

-¿Tienes mangas?

-Oh, shit- no te tenías que enterar de eso, jeje-Rió con algo de vergüenza.

Él no era un verdadero, o gustoso, amante del anime ni del manga, pero un género en común le llamaba la atención; Seinen. Teniendo de entre quince a veinte mangas, incluyendo "Real" y "Tokyo Ghoul", los cuales eran sus favoritos.

-¡Wow! ¿No que muy "quita otaku asqueroso" y no sé qué?-Rió con algo de burla al imitar la actitud de su contrario cuando estaban juntos o jugaban algún videojuego en línea.

-Bueno todo el mundo tiene secretos, ¿no crees~?-Abrió un pequeño cajón, al parecer, que estaba oculto en una parte de su pared.

-A la madre, hijo mío, ¿por qué los tenías tan ocultos?-Preguntó con real curiosidad mientras se acercaba al menor por detrás con una caja en sus manos.

-Bueno, sabes como es mi hermana.-Empezó a sacar manga por manga para meterlos a la caja que Raptor llevaba.-Se mete en lo que no le importa siempre, de hecho, mírala.-Dejó lo que estaba haciendo y señaló la puerta de su habitación, bueno, antigua habitación.

No Homo [Spartor]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora