¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Dante sentía su garganta rasgarse, pero no escuchaba sonido alguno, la sangre que intentaba detener del estómago de Alejandra no paraba, pero su pulso dejo de existir a los minutos, minutos que su mente recordó cuando su abuelo murió en sus brazos.
- es una pena, la de tetas bonitas estuvo en el camino de la bala - las risas de hombres a su alrededor lo hizo despertar de su aterrador recuerdo.
Cuando menos lo espero, ya estaba en el piso, empotrado con fuerza por el tacón de una bota de esquiar en su cabeza, adolorido pidió que no lastimaran a Alejandra, aunque ya estaba muerta.
- ¿no dijeron que el medio japonés era fuerte? -
- parece que se ha hecho en los pantalones, jajajaja -
Dante recibió una patada en el estómago con fuerza, sus fuerzas habían desaparecido de la nada, quedando en el abismo de su pena.
- ¡golpearlo más fuerte! -
La punta de la bota lo dejó sin aire, una costilla parecía haberse roto por la fuerza y el movimiento, el solo se quedó allí, si lo hacía iba a terminar muerto.
- dejen de jugar, tenemos que apurarnos antes de que la noche se ponga, hoy habrá fiesta luego de que terminemos con este grupo, el señor dijo que podríamos tener a la rubiecita para nosotros -
