RECUERDOS DE ADOLESCENCIA

Dia lluvioso

Recuerdos de adolescencia.

(Día lluvioso)

Un rayo cayó y el fuerte ruido que genero fue suficiente para que el muchacho despertara, al parecer después de varios días de harto calor una lluvia había llegado para asi aplacarlo un poco.

Abrió el único ojo que tenía en funcionamiento, lo poco que alcanzo a ver fue suficiente para volver al deseo de dormir y no despertar nunca más. Había pedazos de carne podrida esparcidas por el suelo y un fétido olor rodeando el ambiente, pero tambien estaba su sangre debajo de él.

-Quiero volver a casa...- Era su grana deseo en ese momento, lamentablemente nunca se cumpliría, el lado positivo que veía en todo esto es que sus captores no lo estaban presenciando, por ahora no.

Tan solo pensar en ellos le parecía algo horrible pues solo le generaban dolor a cada momento de su existencia.

Otro rayo cayó cerca del lugar en donde se ubicaba ocasionando un susto de golpe, hace mucho que no salía y no recordaba cómo era la lluvia, tal vez era porque tenía tantos golpes en la cabeza provocados por objetos pesados que "ellos" usaban en su contra. Maldecía aquel día en que esas personas habían nacido.

Su antiguo ojo derecho ya no estaba porque en una de las "bromas" que recibió involucraba quitárselo a la fuerza para su diversión. Ambas manos ya estaban rojas debido al agarre que tenía en esa silla de metal, sus piernas tenían rajadas de vidrios y un "te aprecio" escrito con marcador por su principal agresora.

¿Por qué le ocurría esto? ¿Qué hizo mal? ¿Fue porque en algún momento de su corta vida había sido grosero? Eran varias las preguntas que le recorrían en su cabeza, pero ninguna de ellas le llevaría a resolver algo, ya no importaba mucho porque al final de todo terminaría en una bolsa negra tirado en los basurales. Estaba harto de todo y los truenos no ayudaban en nada para su dolor de cabeza.

Las lágrimas comenzaron a brotar mientras escuchaba como el agua entraba por la ventila...Alto, ¿una ventila? Algo en el cambio, giro la cabeza con la poca fuerza que tenía y allí lo vio, su única esperanza de al fin salir, solo tendría que soltarse de ese agarre y correr lo mas lejos que pueda.

No importaba, si él quería tambien podía, solo era cuestión de mucho esfuerzo.

Con toda su voluntad y a duras penas logro girar esa silla que lo mantenía preso, intentando ignorar el dolor causado en sus piernas, pero ya no importaba porque a unos centímetros estaba su libertad, su dulce y amada libertad... al menos asi parecía.

Cuando al fin estaba avanzando la silla hizo un mal movimiento y a causa de esto se inclinó demasiado y cayo junto con el de cara destrozando por completo su nariz, la sangre pronto comenzó a salir y para su mala suerte aún seguía consiente de todo. Debido a que su nariz era incapaz de respirar ahora solo le quedaba su boca, si no fuera por ella estaría muerto, pero... ¿quería vivir realmente?

En su interior sabía que nada resultaría en un final feliz, sabía que lo encontrarían y lo torturarían peor por intentar escapar, entonces ¿Por qué no arruinarles el plan?

En sus últimos suspiros solo pudo pensar en su novia, en su madre, en sus hermanos y en su amado perrito que acababa de adoptar.

-Perdónenme... pero no fui tan fuerte. – Dijo antes de cometer su propia muerte, cerró los ojos que aún seguían cubierto de lágrimas y cello su boca como acto final.

[...]

- ¡Diablos yo quería que siguiera con vida! - Grito Crystal, pues solo se había encontrado con el cadáver de su "amigo" tirado en el piso pudriéndose en el olor asqueroso.

-Yo te advertí sobre la tormenta y no me hiciste caso. - Agrego Luck, le dio unas cuantas palmadas y se acercó al cuerpo para desatarlo. –Bueno supongo que habrá que buscarte uno nuevo. –

-Arg, ok pero que esta vez sea más obediente y no sea tan cobarde. - Tambien empezó a acercarse para ayudarle, estaba decepcionada pero ya seguramente encontraría a alguien mejor para ser su nuevo "amigo".

Fin