Capítulo 37

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Bruce Wayne había tenido una charla larga, honesta e intensa con sus hijos, contando su historia desde un inicio, pasando por el matrimonio arreglado que les fue impuesto a su madre y a él, su historia de amor con Lillian, lo amarga que fue la despedida con ella, hasta finalizar con la noticia que recibió años después al enterarse que el fruto de aquel amor, resultó ser Lena. Wayne abrió su corazón ante sus hijos, como nunca lo había hecho los dejó ver tras todas esas capaz que celosamente custodiaban su vulnerabilidad, el miedo que a la vez siente de la respuesta que ellos tendrán una vez que terminen de asimilar todo en esta historia y les dijo lo feliz y orgulloso que se sentía por ser el padre de Lena y que no renunciaría a la posibilidad de crear nuevos lazos con ella y que en un futuro reconocerla oficialmente como una Wayne

Selina desde luego también dio su versión de los hechos, sus hijos preguntaron y ella las respondió con total honestidad

Además Bruce les aseguró que nada de esto iba a cambiar el amor que siente por su esposa, que su historia con Lillian Luthor estaba guardada con sus viejas memorias, con la excepción claro, de su hija Lena

Helena y Damian escucharon con mucha atención, les parecía algo insólito, decidieron no dar una respuesta a nada en ese momento, realmente querían procesar todo antes de decir cualquier cosa, Bruce los comprendió y les aseguró que comprendería cualquier cosa y ya para finalizar, les recordó lo mucho que los ama y lo importante que son para él y su madre

Y ahora Helena estaba en el balcón del pent-house que hace poco comparte con su hermano, fumándose un cigarrillo, mientras su cabeza da mil vueltas por todo lo sucedido esta noche, ella esperaba una aceptación o una negación sobre la posibilidad de que Lena fuera amante de su padre y resultó ser algo completamente, el tiro de gracia para ella, Lena Luthor es hija de Bruce Wayne lo que da como resultado, ser hermanas

Ni en sus peores pesadillas, ni en sus más extraños viajes patrocinados por el consumo de un buen porro en su juventud, se imaginó una verdad tan verdadera como esta

¡Dios! Kara se va a volverá loca con esto

-¿Reencontrandote con el cigarrillo?- interrumpió Damian sus pensamientos -Creí que ya estaba en el olvido-

-Bueno- dió una calada al cigarrillo antes de volver a hablar -A grandes noticias, grandes reencuentros-

Damian se acercó a ella y le quitó el cigarro de la mano para después él mismo darle una fumada, ambos estuvieron en silencio compartiendo humo. Hasta que el ojiazul comenzó a reír llamando así la atención de su hermana, que lo miró esperando saber el causante de tan repentina risa

-Diablos, pensar que hace unos años tenía planeado conquistar a Lena, me hace sentir extraño pero a la vez aliviado de no haber procedido, eso realmente habría sido incesto en toda la extensión de la palabra y ahora mismo estaría llorando por haberme tirado a mi propia hermana- hizo una mueca de desagrado -Lena es hermosa siempre te lo eh dicho, pero ahora que sé la verdad mi cerebro no puede imaginarla como lo hacía antes- hizo cara de desagrado

-Hubiera sido horrible tener a Lena de cuñada y yo te habría dejado de hablar por imponerme a mi enemiga de negocios- le dio un codazo en broma y le guiño el ojo para enfatizar el juego

Damian lo entendió a la perfección y sonrió 

Damian lo entendió a la perfección y sonrió 

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