🖤 He Was The Perfect Husband 🖤

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Isla Santorini, Grecia

A penas acababa de bajar de su camioneta cuando Caroline notó que ocurría algo raro en la casa que se suponía que iba a visitar: no había nadie en la puerta de esta esperándolo, cosa que era sumamente extraña considerando que había mandado hace varias horas un mensaje de texto y dejado un mensaje de voz en el teléfono de Hades, y solo por ser él le sorprendía el hecho de que no hubiera ni siquiera respondido o tan siquiera haberle respondido para decirle que no estaba allí, pero no, ni una respuesta ni la propia presencia de ese hombre en su propia casa.

Suspiró cansando, se suponía que había venido a Grecia desde Rusia para pasar unos días con él y Poseidón, pero incluso este, que vino de la Isla Mykonos, se tomó el tiempo de encontrarlo en el bar donde acordaron tomar una coma de vino la noche anterior, mientras que Hades, que vivía en la propia Santorini los dejó plantados a ambos, cosa que le había molestado justo por esa razón, él vivía allí de por sí, debería haber sido él el primero en llegar a esa reunión que se habían planteado, pero no, en toda la noche jamás llegó.

No pensó mucho más de eso antes de subir los cortos escalones de la entrada a aquella mansión, sin embargo, antes de tocar el timbre o siquiera poder pensar en tocar la puerta, el sonidos de pasos en las cercanías llegó a llamar su atención, por lo que volteó hacia esos pasos, encontrándose con una mujer de largos cabellos naranjas al pie de los escalones de aquella entrada.

Perséfone, la esposa de Hades.

–Caroline...no esperaba que vinieras–dijo Perséfone casi que susurrando antes de sonreír muy ligeramente hacia el de ojos bermellón.

–Pover' mne, chto ya— perdón–Caroline por un momento habló en su lengua materna antes de recordar que esa mujer no debía entenderle si no hablaba en griego–tampoco esperaba verte, Perséfone...venía era a buscar a Hades–dijo mientras cruzaba los brazos.

–...perdóname...él no está–dijo Perséfone juntando sus manos.

–¿No está?–preguntó Caroline confundido.

–Es que...desde que habló hace días contigo desapareció, salió de la casa justo después de hablar contigo sobre el viaje que harían tú y Poseidón para reunirse, y no volvió después...–trató de explicar Perséfone bajando un poco la mirada.

–Eso fue casi hace una semana–dijo Caroline afilando un poco la mirada ante esas palabras.

–Por eso mismo, acabo de venir de la policía, reporté su desaparición–dijo Perséfone subiendo lentamente los escalones de la entrada a su hogar.

–Ah...¿y no se te ocurrió que sería buena idea que yo...? No, no yo, que sus hermanos supieran de esto–dijo Caroline casi que con sarcasmo.

–Pensé que volvería al día o a los días, Caroline, no creí que fuera algo serio–dijo Perséfone en una muy pobre excusa.

–Un día, un día es más que suficiente para reportar como desaparecida a una persona cuya vida se basa en la vida de su esposa y sus hijas, y que a duras penas sale para visitar a sus hermanos–dijo Caroline llevando su dedo índice y pulgar al puente de su nariz–dime una cosa, ¿siquiera Macaria y Melínoe saben de esto?

–No, no lo saben...sabes que ellas están estudiando fuera de la isla, no quiero que se preocupen por esto...–dijo Perséfone llevando sus manos a su pecho.

ℕ𝕠 𝔹𝕠𝕕𝕪, ℕ𝕠 ℂ𝕣𝕚𝕞𝕖 🖤 𝑸𝒊𝒏𝑩𝒆𝒆𝒍𝑯𝒂𝒅𝒆𝒔  🖤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora