I ᑎᗴᗴᗪ YOᑌ

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(Tᗴ ᗰᗴᑕᗴՏITO)

🍡

— ¿Tengo algo en la cara? — preguntó Kakucho mientras veía a ___ quien estaba notoriamente sorprendida.

— Ehhh... No, solamente me haz tomado por sorpresa — soltó una pequeña risita — ¿Cómo te ha ido? — PREGUNTÓ curiosamente.

— Bueno, ahora que te veo me va mucho mejor — dijo coquetamente Kakucho con una sonrisa.

La fémina sonrió tímidamente ante aquel comentario de Kakucho, si fuese un poco más boba no sé daría cuenta que le estaba coqueteando, pero prefirió solamente sonreír — Me da gusto que vaya mejorando — no quería cruzar la mirada con aquel, ya que sabía que el color rojo se haría presente para apoderarse de su rostro.

— Bueno, linda, venía a visitarte y a invitarte — dijo Kakucho tratando de buscar la mirada de la chica, cosa que no consiguió con mucho éxito.

— Eh... Perdón la pregunta, pero, ¿A dónde? — dijo curiosa, hace mucho que no salía con. Amigos, las personas cercanas que conoció en la universidad estaba ocupadas, o se habían alejado de ella. Y su única amiga Hinata se había mudado de Japón al extranjero. Así que se la pasaba en su casa o en la tienda.

— Si me dejas primero podemos ir de compras y luego a cenar, claramente si tienes tiempo — sonrió el de cicatriz mientras esperaba respuesta de la contraria.

___ se quedó callada por algunos segundos, sería bueno salirse a distraerse un poco, aparte necesitaba algunas cosas para la tienda, sería la excusa perfecta para conseguir lo que necesitaba — está bien, acepto — la chica ladeó la cabeza un poco confundida mientras entrecerraba los ojos — Me hubieses mandado un mensaje, así te hubieses ahorrado la venida para acá — arqueó una ceja esperando alguna respuesta.

Kakucho miró a ___ por unos segundos intentando encontrar la respuesta indicada — Es que tuve un Pequeño Asunto por aquí y me tomé la delicadeza de venir, aparte perdí tú número — Kakucho se mantenía con las manos en los bolsillos de su pantalón, sus dedos jugaban con la tela por aquella respuesta tan inesperada, y esperando que aquellas excusas fuesen creíbles.

— ya veo, a mí se me pierden muchas cosas, a cualquiera le pasa — sonrió, para después extender su mano — dame tú teléfono, te agendo yo misma el número — dijo sin dejar de sonreír.

El de cicatriz asintió y sacó sus manos del bolsillo del pantalón para después llevarlas a su saco y poder sacar su teléfono del bolsillo interno de este — aquí está — lo desbloqueó rápidamente y se lo entregó a ___.

La fémina lo tomó con ambas manos y con mucho cuidado, abrió la aplicación de contactos y escribió su nombre para después agregar su número, procedió a guardar los datos y extenderle el teléfono a su dueño — ¡Listo!, Ahora ya podrás llamar sin ningún problema — dijo sonriendo — sobre la invitación, ¿Cuándo Iremos? — preguntó curiosa.

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— entonces ustedes vieron a ese tipo, es muy interesante, aquí lo mencionan, sin embargo dice que es de una familia adinerada que se fue a la quiebra — habló el de cabello platinado quién sostenía algunas hojas en sus manos — Muramata Kenji — mikey sonrió y tomó la foto del chico que estaba entre las hojas — este tipo es un estorbo — dijo con algo de molestia.

— Ciertamente lo es — respondió Rindou mientras se cruzaba de brazos — Al parecer ___ lo odia, por alguna razón — levantó los hombros mientras suspiraba.

— Le fué infiel — soltó Mikey de golpe — el idiota le fué infiel a mí Princesa — levantó la mirada dirigiendo la a los Haitani — Lo quiero aquí a más tardar la próxima semana — una sonrisa ladina se formó en sus labios — Por el momento vigilen que no se acerque a ella — dejó los papeles que sostenía sobre la mesa de centro y se puso de pie, caminó a las escaleras con pereza — No molesten — este subió las escaleras lentamente hasta llegar a su habitación; al abrir la puerta de esta se dió cuenta que en el piso estaba tirado un sobre de papel manila el cual recogió, lo abrió encontrándose con más fotos de la fémina — Es ___ — sonrió, pero esa sonrisa se desvaneció al cambiar de fotos, se encontró con fotos de la fémina besando a Kenji, ambos tomados de las manos, de ella sentada en su regazo, sentados en un parque besándose, su cuerpo se llenó de rabia, se adentró a su habitación sin antes azotar la puerta detrás suya — Hijo de puta — miró cada foto, deseaba ser el quien estuviese en lugar de ese idiota, lo envidiaba, necesitaba besarla, tocarla, sentir el calor de su cuerpo, sentir su aroma, quería tenerla.

𝙅𝙪𝙨𝙩 𝙊𝙣𝙚 𝘿𝙖𝙮 | [𝖡𝗈𝗇𝗍𝖾𝗇 𝗑 𝖫𝖾𝖼𝗍𝗈𝗋𝖺] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora