𝙅𝙪𝙨𝙩 𝙊𝙣𝙚 𝘿𝙖𝙮 | [𝖡𝗈𝗇𝗍𝖾𝗇 𝗑 𝖫𝖾𝖼𝗍𝗈𝗋𝖺]

'ღ'- 𝐅𝐫𝐮𝐬𝐭𝐫𝐚𝐭𝐢𝐨𝐧 𝐩𝐭.𝐈𝐈

(𝐅𝐫𝐮𝐬𝐭𝐫𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐩𝐭.𝐈𝐈)

   🍡

Su corazón había parecido detenerse por un breve segundo, no esperó ni un segundo y entre su historial de llamadas  recientes buscó el nombre de uno de aquellos quiénes estaban acompañando a "su princesa", respondió de manera casi inmediata.

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— Kakucho, ¿en dónde estás? — preguntó en un tono neutro esperando a que su preocupación no llegase a notarse, pero, ¿por qué estaba preocupado?, esa cabeza empezó a inundar la cabeza del peliplateado, pero la respuesta la encontraría después, después de saber que su nueva posesión esté en buen estado.

— En el centro comercial, casi llevándola de regreso a casa — vió a la lejanía a ___ quién veía atentamente una tienda que tenía un juego de vajillas en el aparador. — ¿Quiere que la lleve a... Casa? — sí, dudó un poco ante la petición de su jefe, este claramente no se iba a negar, la última vez que pasó algo así Sanzu se había divertido por horas con aquel pobre hombre y él no quería ese mismo destino — Entendido — dijo en un tono firme para así sentir su teléfono vibrar al momento que su jefe cortó la comunicación.

Kakucho se acercó a Koko, y de forma disimulada le comunicó los planes de Mikey, ante aquello el pelilargo asintió. Se acercó nuevamente a la fémina y tocó su hombro al verla pérdida en sus pensamientos mientras veía aquella tienda.

— Hey — dijo de manera amable, miró aquel vidrio que dejaba a la vista del público aquella vajilla de material transparente y detalles en color oro para así dedicarle una sonrisa a esta — Koko, ven — llamó sin mucha insistencia a aquel el cuál obedientemente se acercó.

— ¿Hmm? — dijo, miró la vitrina y volteó a ver a Koko y después a ___ quién mantenía aquella vista de niña pequeña en aquel juego de platos, chasqueó la lengua con fastidio y asintió.

Kakucho tomó de la muñeca a ___, esta lo miró con sorpresa y así ambos entraron a aquella tienda y en su transcurso dejando afuera a Kokonoi.

De todas formas poco le interesaba en que gastaría su dinero pero por alguna razón el chico de cicatriz le había pedido autorización. Después de unos minutos ambos salieron de aquella tienda, Kakucho con dos bolsas y ___ con una sonrisa y un brillo en los ojos. Y aunque a Kokonoi le costara aceptarlo su sonrisa era muy linda.

— Gracias — susurró ___ con cierta timidez, sentía como sus mejillas se habían calentado de golpe, se dió un golpe mental mientras evitaba la mirada de ambos hombres por vergüenza.

Ninguno respondió, solamente siguieron hasta llegar al estacionamiento, y en algún transcurso del camino habían perdido a Kokonoi, sin embargo a Kakucho ni siquiera le extrañaba.

— ¿Dónde se quedó tú amigo? — preguntó angustiada la chica, dirigió su mirada al más alto quien se encontraba acomodando ambas bolsas en la cajuela.

— No lo sé, es casi... — no pudo terminar de hablar, Kokonoi se dirigía hacia ellos con una pequeña bolsa de color negro con detalles dorados en ella, señal de que se había quedado comprando.
Este se acercó y miró a Kakucho dándole una pequeña seña con la cabeza dándole a entender que debían irse. De golpe fijó su vista en aquella fémina, sacó un pequeño pañuelo de la bolsa que llevaba y se lo extendió a la chica.

— Compré una colonia, necesito una opinión que no sea la de ese amargado — este esperó a que tomará aquel, sonrió leve y al ver como la chica asintió este dejó el pañuelo en una de sus manos.