EFÍMERO

CAPITULO 2°

Recuerdo que mama me dijo que la universidad es lo mejor que me puede pasar, que conocer personas no es tan malo como creo, pero para mí es muy difícil mantener una conversación; mis amigas de la escuela pasaban eran muy diferente a mí, eran muy populares y platicaban con toda la escuela, yo solo era la niña que estaba detrás de ellas. No entiendo por que a ellas les gustaba estar conmigo, ella siempre decía que tenía algo especial, y que el hecho de que yo no me percatara de ello lo hacia un mas especial.

Pero hoy estoy enfrente de la puerta de la universidad y no sé si esto es una muy buena idea. Tome valentía y entre, la universidad más hermosa y grande de lo que pensaba, aquí se respira otro tipo de aire. Tal vez no es tan mala de lo que pensaba, tal vez si fue una muy buena idea.

Tengo introducción al derecho como primera clase, la maestra es muy hermosa y simpática, esta clase es muy divertida e interesante. Ahora empiezo a entender por mi madre ama tanto esta carrera.

Después de todas mis clases de la mañana es hora de el almuerzo, no se si ir a la cafetería, creo que comer en las gradas no es tan mala idea. Mientras comía vi como los chicos se integraban en el campo y empezaban a calentar; un maestro se acercó y empezó a ponerles ejercicio, creo que nadie se ha percatado de mi existencia.

Vi correr de un lado a otro a muchos chicos, pero uno llamo mi atención, tenia algo que no pude describir, algo que llama la atención y no pude quitarle mi mirada de encima, hasta que una voz me bajo de la nube en la que viajaba.

-Él es Reney De Lucas- dijo una chica muy hermosa, de cabello castaño y ojos verdes, que estaba detrás mí.

-Hola- fue lo único que salió de mi boca

-Soy Leah Anderson- exclamo con una enorme sonrisa

- Mucho gusto- dije esto estrechando su mano – yo me llamo Elsy Rossi- no supe que más decir así que agaché mi cabeza y jugué con mis manos por unos minutos, hasta que ella corto el silencio.

- Eres de nuevo ingreso ¿verdad? – dijo ella viendo directamente a mis ojos.

- Si- exclame con una sonrisa falsa

- Yo estoy en mi segundo año, gracias por preguntar – dijo, para proceder a reír.

-Perdón no soy muy buena con las conversaciones y haciendo amigas – dije con una tímida sonrisa

- Y si nos saltamos la conversación y nos hacemos amigas- dijo esto mientre se sentaba aun lado mío y tomaba algo de mi almuerzo- Hola nueva amiga- procedió a reírse mientre me miraba a los ojos.

Yo no supe que decir así que solo asentí y me reí con ella. Después de unos segundos de silencio ella volvió a hablar.

-Yo tampoco tengo muchas amigas, siempre me siento aquí sola, pero estoy muy feliz de que desde ahora tu estarás conmigo, si necesitas ayuda con algunas clases cuenta conmigo- dijo eso con la sonrisa más hermosa que he visto, está muy emociona mi primera amiga.

Pasamos el poco tiempo que sobraba del almuerzo hablando de nosotras, aunque me costo trabajo pude llevar la conversación como con mis antiguas amigas.

El tiempo termino y ella salió corriendo si antes decir

-Nos vemos mañana aquí, cuídate; suerte con tus demás clases- y desapareció entre la multitud.

Al culminar todas mis clases de ese día, Sali al pasillo rumbo a la salida de la nada Leah apareció de un solo brinco.

-Terminaste todas tus clases? - dijo con una hermosa sonrisa

-Si, ya me voy a casa- dije con una sonrisa tímida

- Ve con cuidado a mi aun me falta aun una clase, nos vemos en mañana Elsy Rossi- y luego desapareció entre la multitud de nuevo.

Cuando a llegue a casa como es costumbre no había nadie, me prepare algo para comer y luego procedí a ver una película en la computadora. Sin pensarlo me quede profundamente dormir.