04|Discusiones y creencias.

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Violet Brown

«¡Matthew Scott!».

Me sorprendo al ver la figura de Matthew Scott en la puerta de la habitación.

Mis padres sólo miran la situación algo confundidos y yo lo miro a él sin saber el por qué esta aquí.

—Matthew ¿Que haces aquí?—Es la única pregunta que sale de mi boca al darme cuenta de su presencia en el hospital.

—Mmmm... Hola Violet. Siento interrumpir, pero me enteré de que no estabas bien y quise venir a visitarte— Dice el rubio contestando a mi pregunta.

—¿Gracias?—Es que no lo entiendo, si ni siquiera lo conozco lo suficiente bien y está aquí.

—También faltaste a clases hoy, y aproveché y le pregunté a tu amiga, como se llamaba... — Dice lo último en un susurro como si quisiera recordar.

— Rebecca, se llama Rebecca—Dije al darme cuenta de que no recordaba en nombre de mi mejor amiga.

«Que descaro»

¿A quién se le olvida el nombre de mi mejor amiga?... tienes un punto menos Matthew.

Aunque por ahora no quiero estar en una relación después de terminar una lo suficientemente tóxica y traerme muchos problemas.

«Ya quisieras»

Conciencia por favor. ¿estás de mi lado o no?

«Pues del lado de él, con ese cuerpo... no quién no estaría de su lado, papasito»

Ay Dios! Perdona mi conciencia por favor, no soy yo que quiero señor, es ella.

«No estoy segura de que Dios exista, pero bueno»

—Violet— Escucho que me llaman y quito toda conexión que haya tenido con mi conciencia, para luego salir de mi trance.

—Lo siento, ¿Que decías Matthew?

—Decía que si podía hablar contigo... a solas—Lo último lo dice en un susurro al ver a mis padres allí.

—Si claro, no te preocupes. ¿Padres me podrían dejar hablar con Matthew?, es que... es para un proyecto de la escuela— Fue lo único que pudo salir de mi boca al darme cuenta de que esa era la mejor excusa.

Mis padres asintieron y salieron de la habitación del hospital.

Yo al ver que ellos ya se habían ido, miré a Matthew y con la mirada le dije que podía hablar y este al instante se dio cuenta de eso.

—Bueno, Violet yo... quería hablarte de algo, bueno de alguien en específico y pues quisiera tu aprobación para hacerlo— Dice el rubio.

—Primero que todo haré dos preguntas.
Una ¿Quién es ese alguien? Dos ¿Como sabías que estaba en este hospital? Y se que no fue Beca quien te lo dijo.

—Vale, primero es el único hospital que hay en el pueblo, segundo ese alguien se llama, Jesús.

«¿¡Eres idiota!? ¡Claro que solo hay un hospital en el pueblo, Violet!

—¿Jesús?

—Si Violet, Jesús, Dios...

—Ah, quieres decir el que todo lo perdona, quieres decir "Dios" — No era que no creía en Dios pero dudaba de que el existiera y que perdonara a todos nosotros, para mi es algo un poco estupido.

— No "Dios" sino Dios, quisiera hablarte sobre Él y que lo conozcas, pero que también te des cuenta de que Él es maravilloso—Responde este.

—¿Tu eres...? Como se dice esto... Cristino, Crostiano, Cris...— no termino la palabra al verme interrumpida por Matthew.

—Cristiano, Brown... Soy Cristiano— Juro que esta era la palabra que iba a decir, lo juro.

—Eso mismo y gracias por esa palabras de tu parte, se escucha muy bien cuando sale de tu boca... mi apellido.

«Descaradaa

—Mmm, ¿Gracias?... Bueno te estaba diciendo que Dios te ama mucho, aunque seamos malos hijos, Él nos ama mucho—No pudo terminar la frase ya que lo interrumpí.

—Dices que Él nos ama ¿no?—Asintió— ¿Entonces por qué hay tanta maldad en este mundo? Él es Dios ¿no? Puede quitar todas esas maldades en un segundo, según dicen ustedes los "Cristianos"— Hice comillas con la última palabra.

—El problema es que nosotros somos muy desobedientes y eso hace que el pecado llegue más a la humanidad, ocasionando que el odio llegue más rápido a nuestros corazones y hagamos todas esas obra que no son buenas.

—No necesito a Dios en mi vida, estoy feliz sin Él. No voy a quitar mi felicidad visitando la iglesia, escuchando un sermón que no ayudará en lo mínimo en mi vida, para que, luego ustedes juzguen y critiquen a las personas sin conocerlas. Me ahorro todo eso.

—Eso es lo que todos ustedes creen, en realidad la iglesia no es así, todas las personas creen eso, pero el problema es que ellos no la han visitado y tampoco han conocido a Jesús— Dice Matthew, pero cuando estoy a punto de hablar, este me interrumpe y me dice algo que me deja totalmente sorprendida—Se que te cortas, Violet... Me he fijado en tu marcas en los brazos. La primera vez que te vi, me pude fijar en eso, pero tú no te habías dado cuenta y tampoco iba a hablar del tema sin antes conocerte— No terminó de decir la frase ya que se vio interrumpido por mí en ese mismo instante.

—¿¡Y tu quien te crees que eres!? ¡Hablando cosas que ni te incumbe hablar! ¿Para eso vienes? Para juzgar y criticarme? ¿Te crees perfecto solo porque tu no te cortas? ¿Te crees perfecto porque tengas una familia maravillosa? No te conozco, Scott...— Digo molesta al escuchar aquellas palabras salir de su boca— Tampoco me conoces a mi, no puedes opinar sobre la vida de alguien sin saber todo lo que ha pasado esa persona, no puedes hacerlo. Cada persona que fingir estar bien, al final termina sintiéndose una mierda por no ser lo que sus padres quieren que fuera... No eres quién para hablar como si me conocieras... Y respecto a tu Dios, ¿Por que no me ayuda a ser feliz? Si Él lo puedo todo ¿no?.

—porque tu no se lo permites, Violet... Él siempre ha estado ahí contigo, solo que tu no te has dado cuenta. Quiere hacerte feliz, Violet.. pero tú dudas de que Él pueda hacerlo.

—Tengo mis razones para dudar de Él— Digo molesta.

— Él tiene sus razones para alejarse de ti, pero no lo hace. Le fallas mucho Violet, igual que yo... Y aún así no te ha dejado sola. Siempre ha estado ahí, pero tu nunca te diste cuenta, Y tampoco lo harás, si sigues dudando de que Él pueda hacerte feliz.

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Cuarto capítulo...
Solo diré dos cosa.
Te amo Matthew Scott, por aguantar a Violet.
También te amo Violet...aunque seas un poco insoportable ♡
Tuve algunas complicaciones... otra vez, para escribir este capítulo. Espero y me perdonen :(

¡Dios me los bendigaaaaaaaaaa!

Versículo bíblico♡

Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.

Romanos 5:8

¡Casi se me olvida!

Ig: mel_.m46

Inefable (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora