Violet Brown.
Había pasado una semana desde aquel suceso, no podía decir que las cosas estaba mal. De alguna manera estaba más calmada mi vida.
Pero sabía que no debía descuidarme, porque el presentimiento de que algo malo pasaría, no había disminuido.
Mis padre han estado más calmados, más ahora que faltaba poco para las vacaciones.
Ni siquiera sabía que iba a estudiar, pero no estaba enfocada en eso. Necesitaba hablar con mis hermanos, los extrañaba.
Hace meses fue la última vez que hablé con ellos, además, no sé si se defina hablar ya que simplemente nos saludamos.
Entendía que ellos están un poco atareados por la universidad y tampoco los juzgaba, sabía que ya también iba a pasar por eso.
Por otro lado, las cosas con Becca estaban un poco tensas, cosa que no sabía la razón. Desde la última vez que nos vimos su comportamiento fue extraño.
Le había enviando algunos mensajes de texto, pero ella no había respondido. Eso hacia que me preocupara más.
Decidí darme un baño y colocarme algo de ropa para ir a verla, también necesitaba ver que estaba bien y en buenas condiciones.
Era mi hermana, la amaba, y estar lejos de ella sin ninguna razón me inquietaba y no de buena manera.
Al terminar de cámbiame, bajé las escaleras y fui directo a la cocina.
Ahí estaban mis padre, aún no era la hora de la cena. Ellos simplemente estaban conversando.
—Padres...
Los llamé, ellos al darse cuenta de mi presencia ahí, voltearon sus cabezas hacía mi dirección.
—Hija, ¿vas a salir? Veo que estás cambiada—Habló mi padre, mi relación con él no era tan mala.
— Sí, iré a ver a Becca, vendré antes de la cena.
Fijé mi mirada en mi madre, la cual estaba buscando algo cerca de unas cajas.
—Está bien, tu madre y yo iremos preparando la cena. Puedes decirle a Becca que nos acompañe.
Asentí, mamá dijo un simple "adiós" conjunto con mi padre. Con eso salí de la casa.
No es como que quedaba muy lejos la casa de Becca, podía ir caminando.
Esa era nuestra ventaja, no era necesarios tener que ir en auto. Podríamos ir caminando.
Nuestro vecindario era demasiado común, siempre estaba en silencio y en calma.
A los lejos divisé la casa de mi mejor amiga, apresuré mi paso para así llegar más rápido.
El cielo estaba nublado y en poco tiempo empezaría a llover.
Al llegar, toqué el timbre, y no pasó mucho tiempo cuando la señorita Perez me recibió.
—Violet! ¿Cómo estás? Hace tiempo que no vienes. Pasa.
Me recibió con un cálido abrazo, destacaba por ser una mujer cariñosa.
Pasé al interior de la casa, las cosas seguían igual. No me sorprendía.
Becca y ella eran muy sencillas en ese aspecto, su casa no era muy llamativa y eso lo hacía ver lindo y sencillo.
—¿Está Becca? Vine a visitarla. Hace tiempo que no hablamos.
—Ella está en su habitación, tiene ratos metida ahí con ese muchacho.
«¿Muchacho?»
Ella no me había hablado de ningún chico, y siempre que lo hacía nunca me decía alguno nombre.
Yo sé lo respetaba, no iba a forzarla. Pero escuchar eso, hizo que un escalofrío recorriera mi columna.
—¿Un muchacho?
—Sí, puedes pasar. Desde acá escuchaba sus risas.
No dudé y subí las escaleras hacía sus habitación.
En algo no mentía su mamá, desde el pasillo pude escuchar las voces. Pero el presentimiento de que algo iba a pasar no pasaba.
Las risas siguieron y yo ya estaba frente la su puerta, la cual no estaba cerrada. Estaba entreabierta.
Pero hubo algo que llamó mi atención.
"Esa voz yo la conozco"
No quería alucinar y solo abrí por completo la puerta. Quedando paralizada con lo que había visto.
Mi corazón rompió y mi garganta quemó, no podía creer lo que estaba viendo. No podía pronunciar ninguna palabra.
—Becca—Mi voz salió con un susurro el cual llamó la atención de mi mejor amiga.
Las risas había cesado y ella estaba sorprendida por mi presencia. Pero yo estaba rota, por ella.
—Mike es el chico... él es el chico — Di un paso atrás al momento que ella se acercó —Por eso no quisiste decir el nombre.
—Vi... no es lo que parece —Soltó — Las cosas no pasaron así, déjame explicarte.
— ¿Qué vas a explicarme? ¿Qué te estás cogiéndo a mi ex? Eso es lo que vas a explicarme.
—Violet, ella no tiene la culpa—Está vez habló Mike.
«Hijo de puta»
—Tú cállate, no estoy hablando contigo, basura —Fijé mi mirada había mi mejor amiga, bueno, ex mejor amiga—Por eso era que estabas rara toda la puta semana, cogiéndote a ex de tu amiga.
Lagrimas se deslizaban por sus mejillas, intento alcanzar uno de mis brazos. Pero esta vez se lo imaginó
—Vi... escúchame, por favor —Su voz estaba rota, pero no me importaba.
—Eras mi hermana... eras mi hermana y así me pagaste, te amaba con una hermana —Mi voz estaba rota, lágrimas amenazaban por salir— Ahora solo eres una maldita desconocida, no me busques.
Para mí no existes, Rebecca Perez.Salí corriendo de su casa, necesitaba salir de ahí y irme a otro lugar. Me sentía traicionada, me sentía devastada y esta vez no era por culpa de mis padres.
Lagrimas bajaban por mis mejillas, y ya había empezado a llover. Todo mis cuerpo estaba mojado.
De mi boca salió un sollozo desde el alma, no sabía donde ir. Mi única solución quedaba debajo de un árbol.
Me acerqué a él y me abracé mis rodillas a mi pecho con las lágrimas en toda mi cara.
"Mi hermanita me había fallado"
Dolía imaginarlo, pero más vivirlo. Amaba a Rebecca y ella me había fallado.
Una voz me hizo levantar mi mirada, la cuál estaba escondida entre mis piernas.
«Matthew»
—Violet ¿qué estás haciendo ahí? ¿Estás llorando? ¿Por qué lloras, mi flor?
Mi lloro aumentó lo que causó que él me levantara por los hombros.
Pero no podía ni siquiera estar de pie y lo primero que hice fue refugiarme en sus brazos.
Me sentía mal y lo único que necesitaba era un abrazo. Él pareció entenderlo porque me sujetó de la cintura y empezó a acariciarme la espalda.
Mi cuerpo tembló y él me sujetó con más fuerza.
—Está bien... está bien, estoy aquí. No te soltaré.
°•°•°•°•°•°•°•°•°
Que triste.
Ig: mel_.m46
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Inefable (En edición)
RomanceViolet Brown una chica de 18 años, quién le es difícil saber lo hermosa que es y maravillosa también. Conoce a Matthew Scott quién tiene 18 años de edad, él es un chico que ama a Dios y busca que los demás también lo hagan. Él conoce a Violet y hac...