Las rosas siempre son bonitas hasta que el invierno se hace presencia, desgastando sus pétalos y exponiendo sus peores tallos.
Pensé que siempre me verías como una rosa, pero supongo que nunca te parecí lo suficientemente valiosa.
Tomaste nuestro amor, lo quemaste cual cigarro, sin importarte las cenizas y el humo que en mí ibas dejando.
Ahora solo pienso en cual fue nuestro fallo. ¿Por qué ya no recibes mis mensajes? ¿Tan rápido me olvidaste?
Aprendí mucho de ti, borrando cada parte de mí, pero nunca aprenderé a olvidarte tan rápido como tu me demostraste.
Creí que nosotras éramos la excepción de lo que decían. Que estaríamos juntas hasta que nuestras manos tuvieran las arrugas del tiempo.
Bueno, supongo que ahora cuento los días en los que tanto te echo de menos. Aún no sé que hice mal, en qué me equivoqué. Pero supongo que nunca lo sabré.
Soy tan idiota que sigo esperando tu llamada, aquella importancia que tanto anhelaba.
Pero creo que seguiré esperando hasta que las arrugas sean las que llenen mi rostro.
-Maite
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Aprendiendo a olvidarte
PoesiaTe amé más que a mi misma. Lloré por las dos. Cambié por ti. ¿Qué hiciste tú? ¿Me quisiste de la forma en la que yo lo sigo haciendo? Supongo que eso seguirá paseando entre mis pensamientos, pues decidiste rendirte por ambas. Y aún así, lo más herm...