Jennie es la CEO más prestigiosa e importante del país en la industria del entretenimiento, es millonaria, fría con las personas, todos la consideran inalcanzable, es hermosa, todas las revistas hablan de su manera de vestir, es un icono de la moda...
Son las 2 de la tarde y vamos un poco retrasados con el tiempo.
-Mami, ya nos vamos?!- esa era Ella gritando desde afuera de casa.
-Si cariño, solo es que baje Leo!
-Mi niña- llegaba nana desde la cocina -Salúdame a Lisa, dile que la extraño mucho.
-Por supuesto que si nana, se lo diré, no te preocupes.
-Ha sido más de un mes sin ella.
-Ni me lo recuerdes, los niños y yo la necesitamos, la extrañamos mucho.
-Mami, porque demoran tanto? Los mellizos ya se quieren ir.
Ella volvía a entrar a casa con uno de sus hermanitos de cada mano.
-Mamiii!!! - Mamiii!!! - hablaron los dos al tiempo y corriendo hacia mí para que los alzara.
-Que pasa mis amores?- les pregunté mientras me agachaba y los agarraba en mis brazos.
-Quiero a mami- dijo Lily con un puchero.
-Ya veremos a mami?- Luca tenía los ojos casi a punto de derramar lágrimas.
Luca y Lily tienen dos años y medio, fue una total sorpresa saber que eran dos, Lisa se desmayó cuando nos enteramos en la primera ecografía ecografía.
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Pero sí les quiero contar que el anuncio de ese embarazo fue muy diferente, porque fue ella la que se enteró primero y me sorprendió con la noticia, cómo se enteró primero?... Pues acabábamos de volver de Capadocia, estábamos allí por nuestras vacaciones de tres semanas de nuestro aniversario, así que cuando volvimos a casa me mandé a hacer los controles médicos de rutina ya que aún tenía un par de días libres, además no habían sospechas de nada, estaba perfectamente bien y no habían síntomas.
Entonces al día siguiente de hacerme los estudios le pedí a mi esposa que por favor recogiera los resultados en la clínica, yo tenía una junta importante y no podía pasar por ellos.
En el resto de la tarde no me contestó ningún mensaje y tampoco atendía mis llamadas, eso me pareció absolutamente extraño, llamé a Chu y a Rosie y no sabían nada de mi esposa. Inevitablemente me preocupé, apenas dieron las 5, salí de mi oficina directo a nuestra casa, cuando llegué me sorprendió mucho no ver a nadie, Ella y Leo siempre corrían a saludarme, pero ninguno lo hizo esa vez.
Los busqué en sus habitaciones y no estaban por ningún lado, llamé a nana y tampoco, marqué a Lisa y menos, de verdad que la angustia aumentaba, pero todo frenó hasta que escuché a Kuku llegar desde el jardín, pero eso no era lo que llamó mi atención, lo que llamó mi atención fue el globo que mi bebé traía atando a su collar.
