10.

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Naruto rodó sus ojos por todo el escritorio y dejó el juguete —¿Porqué siempre se lo dejan a Sakura-chan?—

Sasuke sonrió con mesura —Tú debes saberlo mejor que nadie—

El rubio sonrió

Naruto fue a su casa dejando al Uchiha en la oficina mirando como se iba

~•~

Sakura no podía concentrarse con todo lo que la aquejaba, lo único en esa casa que no le preocupa era el menor de sus hijos que estaba leyendo con vaso de jugo a su lado, por eso lo veía cada cierto tiempo, Arashi se veía tierno y eso la calmaba

Kawaki puso pausa y fue a la cocina, Sakura lo siguió con la mirada, él le enseño el jugo —¿Puedo?— preguntó un poco obligado

—¿Puede?— le pregunto al dueño del jugo

El peli-rojo sorbo de su popote y afirmó —No importa—

El de ojos grises se sirvió y pasó sus dedos por los sorbetes, negando su propia voluntad

—Puedes tomar uno si quieres— permitió la mujer

Él un poco sonrojado lo tomó y regreso al lugar que ocupaba

—¡LLEGUÉ!— gritó el Uzumaki quitando su capa y chaleco

—Bienvenido— exclamó el oji-jade

—Bienvenido por los dos— soltó su esposa mirando al chico inmerso en el videojuego

—¡Oh! ¡Es genial que te hayas interesado en algo, Kawaki!— exclamó acariciando su cabeza

Él se escondió en sus hombros

—Sakura-chan tengo que hablar contigo a solas— dijo seriamente

Arashi y Sakura se veían por la seriedad que Naruto había imprimido en su hablar

—Bien— aceptó —Arashi-chan ve a jugar con Shinachiku o Hanami—

Eso no fue del todo el agrado del Kage porque Kawaki estaba ahí y se podía quedar con él

Salieron y el rubio ni siquiera espero salir totalmente y fue escuchado por el niño

—Pudieras tratar de que Kawaki te agrade— dijo cerrando la puerta

El de perforaciones sintió un malestar que atribuyo al jugo pero el origen de éste era más arriba

Arashi subió y tocó la puerta de su hermana, ella abrió; su cuarto era un desastre

—¿Qué pasó?— preguntó sorprendido

—Nada~— dijo nerviosa e irónica y empezó a levantar las cosas

El peli-rojo encontró lo que Hanami le iba a regalar a Shinachiku

Era la figura de dos ninjas haciendo paz entre ellos, aunque estaba incrédulo de que eso fuera obra de su hermana que se distinguía por ser buena en pintura pero mala en el resto de manualidades por una extraña razón

Ella levantaba dibujos que sirvieron de base

—¿Lo hiciste tú, hermana?— cuestionó mostrándole aquello

—Sí— afirmó un poco avergonzada

—Disculpa por lo que voy a decir, pero...¿Cómo te salió tan bien?—

La oji-azul sonrió y lo tomó para verlo más de cerca —No sé— contestó honestamente —Creo que es suerte, solo... salió así, después que lo intente—

—¿De qué está hecho?— preguntó el pequeño

—¡Un material que yo invente!— estaba orgullosa aunque su madre la mataría por arruinar una bandeja del patio

Especial [NaruSaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora