My Beloved "Semana Stark-Rogers" ***EDITANDO***

Día 1: Primera Vez.

Era una mañana como cualquier otra, despertó y lo primero que hizo fue buscar el calor de su esposo, sorpresa fue para el encontrarse solo en la cama. Él no lo sabía, pero todo había terminado.

Sin darse cuenta, de un momento a otro, se encontraba sentado en el pequeño comedor teniendo enfrente de él los papeles de divorcio que Tony le estaba entregando, esa mañana que despertó sin su esposo aun lado, lo encontró en el comedor con unos papeles en mano y sus maletas listas, ¿Cómo llegaron a esto?, de un día a otro parece que todo se había acabado, pero en el fondo los dos sabían que no era así, la relación no marchaba bien últimamente, ya no tenían sexo, las discusiones eran frecuentes y casi no pasaban tiempo junto, pero aun así, Steve no llego a creer que las cosas terminarían así repentinamente, todavía podían arreglar su relación, podían hablar de la situación o tomar terapia de pareja, aun podía haber algo que rescatar, sin embargo para Tony estaba claro que no.

Tony miraba nervioso a Steve quien leía con cuidado los papeles, realmente no había complicaciones, todo estaba listo, Steve se quedaría con el departamento, cada quien conservaría su dinero y él se iría de ahí, solo faltaba la firma de Steve para finalizar el trámite.

Tony estaba preparado para todo, para reclamos, para demandas, para ruegos, para cualquier cosa, pero lo que paso lo agarro desprevenido.

—Está bien, firmare— dijo Steve con la voz apagada —Solo pido una condición antes de firmar—

—¿Cuál es esa condición?— Pregunto Tony rogando que no fuera algo complicado o difícil de realizar.

—Solo pido que por lo que quede del resto del mes, nos veamos y me des un abrazo— Menciono Steve con un nudo en la garganta.

—Steve...— Tony iba a replicar, pero es interrumpido por el rubio.

—Solo pido eso... por favor— suplico mientras lágrimas traicioneras comenzaron a salir de sus ojos.

—Está bien— dijo soltando un suspiro para después tomar sus cosas y salir de ahí.

Una vez escuchó el sonido de la puerta cerrarse, Steve finalmente se derrumbó.

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Steve se encontraba en el parque, para ser más especificó en la zona donde había puras flores, todas de diferentes tipos, rosas de todos los colores, orquídeas, girasoles, margaritas, etc. Se encontraba en una de las bancas que había en la zona, estaba esperando a Tony, lo había citado ese día y lo esperaba desde hace 45 minutos, por un momento llego a creer que lo plantaría, pero al visualizarlo de lejos soltó un suspiro de alivio.

—Hola, disculpa la tardanza— saludo el moreno.

—No te preocupes, yo también acabo de llegar— mintió Steve.

—Y dime ¿qué hacemos aquí?— cuestiono el moreno.

—Buenos... Tal vez no te acuerdes, pero aquí tuvimos nuestra primera vez... nos dejamos llevar por el momento y una cosa llevo a la otra y terminamos haciéndolo en este jardín de flores a la luz de la luna— menciono Steve con un sonrojo en sus mejillas.

Fue en una de sus primeras citas en las que después de cenar decidieron ir a dar un paseo por el parque

Tony no dijo nada, recodaba ese momento, pero lo único que podía pensar era que esta era una técnica barata para que el diera marcha atrás con lo del divorcio.

—¿Puedo abrazarte?— pidió Steve ante el silencio de Tony, el moreno cedió ante la petición más que nada por lástima que por cariño. Steve le da un fuerte abrazo una vez se separaron Tony decidió que lo mejor era retirarse.