Saturno//Jegulus

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<<Yo no quería amarte, tú me enseñaste a odiarte>>

Nunca me había enamorado así antes, y ojalá nunca lo hubiese hecho, odio que el corazón no entienda razones.

James Potter era la persona menos madura que podía conocer, no podría llevar una relación seria, y mucho menos conmigo.

Y lo llegué a odiar, o algo parecido.

Yo no quería amarlo, mi corazón se enamoró de él.

De los lindos momentos que pasábamos juntos, de cuando no era un estúpido.

Él me mostró su peor parte y me enseñó a odiarlo. A veces me daba rabia saber que alguna vez estuve enamorado de él.

Pero ahora que lo pienso fríamente, y no solamente porque tenga las manos frías escribiendo en este diario, supongo que me odiaba a mi mismo y a la idea de como me pudo gustar alguien que a veces ni siquiera me trataba bien.

Remus solía ponerle un alto, porque literalmente no comprendia de emociones, no tenía empatia.

El magnífico James Potter era increíble por existir, jugar al quidditch, tocar el piano y ser un mujeriego.

Bueno, si, algo de resentimiento tengo.

Pero lo que más me molesta es que yo estaba dispuesto a pasar por cualquier cosa con tal de que el me notara, de estar a su lado. No interesaba si tenía que volver a las mazmorras caminando a altas horas de la noche solo porque me había quedado más tiempo para pasar con él.

Porque realmente lo amaba.

Y el me enseñó quien realmente era.

Amé todos sus defectos hasta que me cerró la puerta en la cara, ese día no fui bienvenido en su casa y me dejaron de hablar, simplemente.

Ahí lo comencé a odiar.

Pero lo defendía de Pandora y cualquiera que osara a decir algo malo de él.

Así que no lo odiaba ¿o sí?