Capítulo 32

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El pequeño Taehyung junto a la pequeña Jisoo jugaban en el patio del orfanato, tenían diferentes juguetes y peluches alrededor del verde césped. Solo eran ellos dos en su mundo.

– Jichu, hay que jugar a las escondidas. – propuso Taehyung, ganando repetidos asentimientos de cabeza de la mencionada con su tierna sonrisa, dando a indicar que era una gran idea.

– Pero no hagas trampa Tae Tae. – dijo la pequeña con un lindo puchero formado en sus labios.

Al pelinegro se le hizo tan tierna dicha escena que atrajo a Jisoo de sus mejillas y le plantó un besito en su frente con una sonrisa, contagiando a su pequeña.

– Está bien, Jichu, contaré hasta veinte, ve y escóndete.

La pelinegra hizo caso y corrió en dirección contraria a Taehyung para buscar un lugar donde esconderse, mientras que el último mencionado se volteaba para cubrir sus ojos con sus manos y empezar a contar.

– Diecinueve y veinte. – dijo antes de girar su cuerpo. – Lista o no, ¡allá voy!

Taehyung empezó a caminar rápido con una tierna sonrisa cuadrada para buscar a su mejor amiga, recorrió casi todo el patio del orfanato, pero no encontró rastro de la pequeña pelinegra.

Frunció su ceño y sus labios, ya que no había nadie más en el patio, más que él buscando a Jisoo, pensaba en ir adentro a los dormitorios, salones o cafetería, pero antes de que pudiera dirigirse a alguno de esos lugares escuchó un gritó agudo.

Y no cualquiera, era la voz de su pequeña Jisoo.

– ¿Jisoo? – preguntó en dirección donde se escuchó el grito.

No recibió respuesta, pero se encaminó a dicho lugar, se extrañó que ahora el patio de juegos era muy grande, poco a poco se empezó a adentrar en un bosque, había árboles y pinos muy altos, tierra y se escuchaban sonidos de grillos y pájaros.

Taehyung se empezó a preocupar por si Jisoo se había perdido en aquel extenso bosque.

– ¿Jichu, estás por aquí? – preguntó hacia la nada.

Se escuchó otro grito de la pequeña.

– Jichu, ¿dónde estás? – exclamó volteando a todos lados y empezando a trotar. Hasta que algo hizo que se quedará helado en su lugar.

– ¡Tae Tae ayudame! – se escuchó la delicada voz de la pelinegra al fondo del bosque.

– ¡Jisoo, no te veo! – el pequeño corría como nunca antes, buscando con su mirada a su pequeña amiga, empezandose a desesperar.

– ¡Por aquí! – se escuchó de nuevo la voz de la menor.

Taehyung no veía más que árboles y pinos, no había ninguna cabaña o construcción cerca. Su respiración se hacía más pesada y estaba muy cansado de tanto correr.

– ¡Tae por favor encuéntrame! – gritó Jisoo desde el mismo lugar que las veces anteriores.

– ¡Jisoo! – comenzó a correr de nuevo buscándola por todas partes, lágrimas se empezaban a formar en sus lindos ojitos.

– ¡Por favor ven rápido!

– ¡Jisoo, resiste! – aún no había rastro de ella.

– ¡Tae!

– ¡JISOO! – sus cuerdas vocales ardían por todos los gritos.

Después de eso no se volvió a escuchar la voz de la mencionada. Rendido, Taehyung se desplomó al suelo cansado de tanto correr, cayendo con sus rodillas, con dolor de cabeza y sollozando fuertemente, gritaba el nombre de la niña de sus ojos y sueños, pero ya nunca volvió a escuchar su voz.

Who are you? | Vsoo / TaesooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora