tranquilidad;Trueno

06

Brune

Mientras la profesora hablaba de no se que cosa, yo lucho por no quedarme dormida

-¿hablaste con Mateo anoche?- asentí

-no podía dormir y pintó una llamadita.

-sus llamaditas están pintando muy seguido.

-y bueno, la que puede, puede ¿y la que no? Critica.- sonreí cuando me sacó la lengua -no seas infantil.

-¿qué te haces la grande ahora porque salís con Mateo?- hizo montoncito con la mano y yo me reí

-no salimos, somos amigos

-contame otro chiste que este me lo dijiste banda de veces. ¿cuando te vas a dar cuenta de que al pibe le gustas?

-¿cuando vas a entender que nunca me va a pasar la cabida que a mi me gustaría? Él me ve como una amiga, una nena, una hermanita.

-muy amiga, muy nena y muy hermanita no te considera si te mira el culo cada vez que tiene oportunidad.

-cállate ¿querés? Necesito una segunda hoy, Franco se va a la casa de la novia y no viene hasta mañana, y no quiero quedarme sola

-hoy es imposible amiga, vienen mis viejos y me quieren en casa.

-que paja, voy a tener que quedarme sola.

-aprovecha que mañana no tenemos clases y llama a tu wacho.

-no...- me hizo señas y yo me quedé en silencio

-mandale un saludo a Mateo de mi parte, decile que tiene mi completa aprobación para ser tu novio.- con sus palabras entendí que Tomás, amigo de Bruno, estaba escuchando nuestra conversación ya que estaba sentado en la mesa de al lado

-dale, yo le digo.

A Anto nunca le gustó Bruno como para ser mi novio y se lo hacía saber de todas las formas posibles, no es secreto para nadie, así que con sus palabras iba a hacer arder el infierno

Tengo que hacerle más caso a mi amiga con estos temas, cada vez que uno de mis novios no le gusta es por algo, pero siempre terca

Les doy bola igual

-dormí un rato que después te paso lo que hicimos.

-Sos un amor, gracias.- le regale una sonrisa y puse mi cabeza encima de mis brazos, después de ponerme la capucha de la campera para tapar la luz

[...]

Al final del día me encontré a mi misma en la hora de cenar haciendo tarea y completando la carpeta

En el recreo Anto y yo empezamos a ver que era lo que me faltaba y ella me paso las hojas para que yo pueda completar mi carpeta

-¿no vas a ir a comer?

-no tengo hambre, come vos. gracias igual.- le respondí a Franco sin dejar de copiar

-¿querés que te traiga la comida?

-no gracias.- escuche la puerta cerrarse al mismo tiempo que mi celular sonó, un mensaje

Revise los mensajes desde la barra de notificaciones y volví a bloquearlo

Tenía un mensaje de Mateo, pero quería terminar de completar la carpeta y encima tenía tarea que es para mañana

Un embole

Había estado dos horas terminando la tarea y otras dos horas jugando, agarré mi celular y baje a buscar algo para comer ya que me pintó el bajón

Intente no hacer mucho ruido, pero mi celular me arruinó el silencio