Mi Ángel

Capítulo 10

Ya habían pasado un par de horas desde que su madre había fallecido, su tía había dado aviso a Jimin y Jungkook y estaban en camino al hospital, Yoongi por su parte, aún seguía sentado sobre la silla del pasillo, casi inmóvil, mirando hacia el suelo, parecía haberse perdido completamente en sus pensamientos.

Oyó pasos a lo lejos, y a una voz dulce llamar su nombre, y finalmente alzó la mirada, provocando que volviera a la realidad, a lo lejos logró divisar una blanca figura, las lágrimas provocaban que su visión se vea algo borrosa pero en cuanto se acercó supo que se trataba de Jimin. 

-Lo siento mucho Yoongi, todo estará bien, yo estaré contigo, dijo Jimin. En cuanto llegó, se sentó a su lado, casi arrojándose sobre Yoongi para abrazarlo.Al escuchar sus palabras Yoongi solo comenzó a llorar.

Después de un tiempo, Jungkook se acercó a ambos y se sentó al otro lado de Jimin, y al igual que Yoongi apoyó su cabeza sobre su hombro y también comenzó a llorar, ninguno decía nada, solo se oían sus sollozos en el pasillo, y el llanto de su tía dentro de la habitación de su madre.

Jimin sostuvo la mano de Jungkook y Yoongi al mismo tiempo con sus manos, las apretaba fuerte, no sabía qué hacer, ni qué decir para hacerlos sentir mejor, sentía a Jungkook llorar sobre su hombro y su cabeza se apoyó sobre la de él, pero no sabía si debía hacer lo mismo con Yoongi, y se debatía con si mismo respecto a qué hacer con él ahora que sabía la verdad, él le había mentido, traicionó su confianza y eso le dolía mucho, pero ahora no era el tiempo de confrontarlo, su madre había muerto y Yoongi estaba afectado, no quería causarle más dolor asique estaba dispuesto a olvidar lo que pasó, ahora estaban juntos en esto, y Jimin no podía evitar sentir que debía ser fuerte por ellos dos.

Para el final de la noche, los dejaron ir a casa a descansar, mañana comenzarían los preparativos para velar a su madre, ambos hijos estaban devastados asique Jimin prometió hacerse cargo de todo. Ahora él conducía el auto de regreso a casa con ambos hermanos, ninguno decía nada, solo se oía el ruido del auto y de la carretera.

Al llegar a casa, bajaron en silencio y Yoongi se dirigió a su cuarto sin decir una palabra, sin despedirse. Jungkook se dejó caer sobre el sofá del living y comenzó a llorar desconsoladamente, cubrió su rostro con sus manos y Jimin rápidamente se sentó a su lado, tomó las manos de Jungkook e hizo que las bajara así él podría limpiar sus lágrimas con sus dedos, después lo abrazó muy fuerte, para que notara que no estaba solo, y con sus pequeñas manos acariciaba su cabello. Luego de un tiempo Jungkook pareció calmarse, aún caían lágrimas de sus ojos, pero su respiración ya no se oía agitada, Jimin dejó de abrazarlo pero Jungkook no quería perder su contacto asique se acostó sobre el sofá y colocó su cabeza sobre las piernas de Jimin, y cerró sus ojos, ese era el único lugar en donde iba a poder dormir tranquilo, el único lugar donde estaba en paz.

Mientras tanto, Yoongi se encontraba recostado sobre su cama, estaba cansado y sus ojos se cerraban pero aún así no podía dormir, sus pensamientos lo atacaban, lo hacían sentir culpable. Después de unos minutos o quizá horas, no estaba seguro pero pareció quedarse dormido, luego escuchó que la puerta de su habitación se abría y se despertó, pero sus ojos estaban tan pesados que no podía abrirlos, luego sintió que alguien se sentaba a su lado y una mano acarició su cabello, esto lo asustó un poco y se forzó a darse la vuelta para ver de quién se trataba, y luego lo vio, era Jimin.