» Bonten atraviesa un grave problema cuando se enteran que su jefe, Sano Manjiro de 27 años se convirtió en un niño de 2 años. . . «
「 FANFIC DE TOKYO REVENGERS 」
Ambientado en el Arco de Bonten .
─ Mikey, ¿dónde estas~? ─Kai vio debajo de la cama por enésima vez.─ Puedo sentir tu aroma a Dorayakis.
Mikey miro desde la distancia como la mayor lo seguía buscando. El se encontraba escondido dentro del armario, esperando que la fémina lo encontrara después de varios minutos jugando a la escondidas. Aunque después de esperar un largo rato, Mikey decidió que era momento de salir, ya se estaba cansando de esperar que Kai lo encontrara.
─ ¡BU! ─Mikey pateo las puertas del armario, levantando los brazos, acompañado de aquel grito en un intento por asustar a la mas alta.
─ ¡Oh, que susto! ─Kai se coloco una mano en el pecho y miro hacia el armario donde se encontraba un muy divertido Mikey, quien dejaba ver su brillante sonrisa dejando salir suaves risitas.─ Bueno, eso es todo. A bañarse.
Mikey puso una cara de horror al oírla.
─ ¡NO QUELO! ─el menor salió corriendo de la habitación, siendo seguido por Kai quien intento no perderlo de vista.
─ ¡Tienes que bañarte, sino no podremos ir al parque! ─le grito mientras lo perseguía por todo el penthouse. Si Sanzu estuviera ahí, definitivamente la mataría, ya que no toleraba que corriera detrás de Mikey por la posibilidad de que el menor terminara lastimándose por su culpa.
Después de varios minutos, Kai logro tomar a Mikey, llevándolo al baño.
─ ¡No, no! ─el menor se sacudió violentamente entre los brazos de Kai, estaba muy exaltado.
─ Vamos Mikey, no puedes no bañarte. ─Kai cerro la puerta del baño detrás de ella. La ropa de Mikey ya estaba ahí, también sus juguetes y la toalla. Kai y Mikey habían acordado que el menor se bañaría luego de jugar a las escondidas. Parecía ser que el tiempo había pasado muy rápido porque Mikey se había olvidado por completo de aquella parte del trato.─ Prometo que será rápido.
Mikey siguió haciendo una rabieta aun cuando Kai le había sacado su ropa. Cuando el menor estuvo dentro de la tina, siendo rodeado por el agua calentita y sus juguetes se olvido por completo de la rabieta y comenzó a reír y a jugar con los juguetes mientras Kai le pasaba la esponja por su cuerpo. Mikey se divertía mucho jugando con aquellos juguetes que le habían comprado, uno de ellos era un patito de hule, el cual le traía recuerdos.
─ Cierra los ojos. ─pidió la peliazul mientras comenzaba a ponerle shampoo al pelo del menor. Mikey hizo caso y cerro sus ojos, dejando que la mayor lavara su cabello. Al verlo tan cómodo, Kai no dudo en preguntar.─ ¿Se siente bien?
─ ¡Mjmm! ─Mikey asintió suavemente aun con sus ojos cerrados.
Cuando Kai termino de lavarle el pelo le paso una toalla por los ojos para que pudiese abrirlos nuevamente.
─ Listo, vamos a secarte. ─Kai tomo la toalla la cual tenia unas orejitas sobresaliendo de la capucha.
─ ¡No quelo! ─Mikey se negó rotundamente a salir de la tina. Estaba muy calentito ahí dentro.
Kai suspiro audiblemente y se preparo mentalmente para intentar ahora convencer a Mikey de salir de ahí.
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