¿Su mundo? Un cuento de hadas(Gemeliers)

Por favor,hazlo por mi-Capítulo 9

(...)

Vi desde dentro a....

Marina con una chica a su lado.

Esta iba vestida con lo que aparentaba ser un uniforme de color burdeos,el que le combinaba muy bien con sus ojos aguamarina y su larga melena morena rojiza que le llegaba por la cintura.

En su rostro mostraba una bonita sonrisa,tan perfecta, que parecía que se la hubieran pegado.

Al verme,Marina se dirigió hacia mi y me saludo con dos besos en mis mejillas.

La sonrisa de aquella chica se hizo más grande aun, si eso era posible, y se disponía ha hablar cuando lo hizo Marina.

MARINA:Hola Paloma, esta es Rocío,mi vecina.-Rocío...la verdad es que le pegaba su nombre.

ROCÍO:Hola encantada - Me saludo de la misma forma que Marina anteriormente y empezamos a hablar.

Como no, salió el tema de Daniel y Jesús.

Rocío al escuchar este tema dirijió su mirada al suelo,no parecía estar muy cómoda...

Nos despedimos de ella y nos montamos en el ascensor para subir la maleta a su casa.

Estaba muy incomoda y no paraba de preguntarme:¿porque Rocío aparentaba no querer saber nada sobre los gemelos?

Deje de comerme la cabeza y decidí romper el hielo y preguntarle a Marina sobre Rocío.

YO: Marina

MARINA: Dime

YO:Ehh... Rocío...Conoce a los gemelos?-Esta pareció no saber que responderme y yo me sonrojé más de lo que estaba.

MARINA:Si - Me respondió seca.

YO:-Ya que no me pensaba responder decidí ir al grano - Ha tenido algún rollo con Jesús?-Me tape la boca.Pe-Pero que había dicho?.

Marina se rió en mi cara.

MARINA:Estás celosilla eh
-la verdad yo no le veía la gracia.

YO:Yo? Que va

MARINA: Para nada,para nada.

YO:O bueno,o un rollo con Daniel

Marina dejo de reírse y me contestó;

MARINA:Eh mmm es la ex novia de Jesús.

Sentí como me clavaban una estaca en el corazón.

La sonrisa que suelo tener en la cara se me borró de golpe.

Pero Marina al ver mi reacción intentó aclararse.

MARINA: Era su novia pero duraron poco,no eran compatibles y ella sólo buscaba tener con quien liarse.-Aunque me rencorfortan un poco sus palabras seguía sintiendo esa punzada en el corazón.

Cuando ya habíamos dejado la mochila en su casa bajamos y nos dirijimos al Instituto.

Con la mala suerte de que comenzó a chispear.

Un chispeo que se convirtió en un diluvio.

Como cada mañana,me enfrentaba a la gran masa de gente cuyo objetivo era llegar al Instituto.

Con la mala suerte de que perdí a Marina de vista.

Genial - pienso irónica.

Gotas de agua caen por mi rostro mientras se van mezclando con las saladas lágrimas que han empezado a brotar de mis ojos.

Y no son nada más ni nada menos que por la escena que me encuentro delante de mi.

Es Rocío la que le está comiendo la boca a Jesús.