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⊹ ᨘ໑ ¡ jeno es sinónimo de perfección.
jaemin, bueno, tiene un defecto, y no es el defecto que primero vas a notar, es sarcástico y su humor negro llega a ser algo desesperante, sólo es un escudo porque sabe lo cruel que la ge...
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Jaemin a pesar de que admitía por completo el hecho de haber disfrutado demasiado el tener relaciones con Jeno, se mantenía reacio a sentir algo. Habían pasado dos días y no iba a mentir con respecto a que despertarse a un lado de Jeno se sintió demasiado correcto y le gustó. Desde que terminó con Chan o, mejor dicho, desde que este lo abandonó, no quería involucrarse con alguien porque en sus palabras.
"Prefiero que me rompan el culo y no el corazón"
No quería sentir algo por Jeno y se estaba obligando a no sentirlo, pero el estúpido de Lee se lo hacía malditamente difícil, era tan noble, tan bueno y tan romántico que sentía que en cualquier momento le daría diabetes, estúpido Lee.
Jeno estaba en su estudio casi cagando arcoíris, la razón del por qué tenía nombre y apellido, Na Jaemin, para el más alto el haber dado aquel paso con Jaemin sólo fue la cereza del pastel, estaba jodido, lo cual en palabras de Chenle era sinónimo de estar enamorado, a sus ojos el pequeño castaño era el chico más perfecto del mundo, con esa carita de ángel, esa hermosa y deslumbrante sonrisa, sin contar con ese cuerpo que invita a pecar, y esa boca que, bueno, soltaba más veneno que víbora de cascabel, incluso recuerda tomarle una foto mientras estaba distraído, podría verla una y otra vez sin cansarse.
Si Jeno pudiera ponerle un adjetivo al amor que sentía en esos momentos sería intenso, quería al chico con una intensidad de la cual no creía que existiera, el ver aquella foto le hacía sonreír involuntariamente y recordar cómo se despidieron.
"Eres bueno Lee, podemos coger cuando gustes"
Sabía que Jaemin hablaba en serio, porque así era él, no conocía el pudor o la vergüenza, y ese pequeño detalle lo volvía loco. Su lápiz se deslizaba por las hojas escribiendo cientos de palabras que no estaba seguro de donde provenían, el resultado terminó por convertirse en una canción, tenía tiempo que no escribía de su propio puño y letra, y fue bueno, fue bueno porque todo se trataba de Jaemin, y de ahora en adelante así seria.
El sonido de la puerta lo sacó de ese pequeño mundo de arcoíris, flores y unicornios, Mina se encontraba de pie junto a la puerta.
-Amo tu oficina Nono.
-Gracias Mina, me da gusto verte, ¿qué te trae por aquí? - El chico no mentía, en realidad quería a su amiga.
