Mi felicidad (Sabo x T/N)

¿Y qué hago ahora?

- ¿Qué te ha parecido? ¿Está difícil?- pregunta Nami.
- Mm... Pues... No sabría qué decirte...- Sabo sigue en su mundo. No se le quita de la cabeza el momento que vivió antes-.
- ¿Sabo? ¿Estás bien?
Sabo sigue absorto.
Nami sonríe.
- Me parece que no nos hemos equivocado- piensa.

T/N sale y busca a Nami.
- ¿Se puede saber de qué vas?- le espeta sin más.
- ¿Yo? No tengo ninguna culpa de querer ayudar a mi mejor amiga. ¿O sí? Vamos. Además, estate tranquila, que tiene pareja ya.
- ¿Y eso qué me importa? ¡No lo quiero aquí! ¿Cuánto tiempo va a estar?
- Aún no sabemos.
- Quiero morirme...- se pone una mano en la cara.

Sabo se dispone a hacer sus llamadas pendientes. Primero llama a Dragon, su superior.
Se descuelga.
- ¿Sí?
- Hola jefe.
- Hola Sabo. ¿Ya tienes las cosas claras?
- Sí. Me llevará por ahora... Tal vez con un mes sería suficiente. Pero te iré contando.
- De acuerdo. Bueno, saluda a mi hijo de mi parte. Hablamos pronto.
- Sí. Adiós.
Cuelga.
- Y ahora... A Koala-sama... ¿He hecho bien en venir aquí...? No estoy del todo seguro...
Pero justo llega Luffy.
- Sabo, ¿quieres comer algo?
- Sí, por favor. Tengo mucha hambre.
- Vente.

Sanji está preparando la merienda para las chicas.
- Sanji-kun, ¿nos haces algo para merendar a nosotros también?
- ¿No puedes hacértelo tú?
- Las chicas también pueden.
- ¡Ni se te ocurra volver a decir eso enfrente mío!
- Vale, vale... Perdona, jeje...
- Qué queréis de merendar...
- Sabo, pide lo que quieras- le dice Luffy.
- Lo que sea está bien.
- Perfecto.

En unos minutos ya estaban todos merendando tranquilamente, no sin huir de las miraditas que Usopp le echaba a T/N. Y no precisamente buenas que digamos...
- ¿¡Se puede saber qué miras narizón!?- le grita T/N harta ya.
- ¿Por qué me chillas si no te he chillado?
- Se te nota en la mirada que me tienes un desprecio ¡hasta ahí arriba!
- ¡Tú tampoco te quedas corta!
T/N se levanta dispuesta a darle una ostia en todo el careto, cuando Robin hace florecer brazos que la sujetan.
- ¡Suéltame!
- Lo siento T/N. Pero tengamos la fiesta en paz por una vez. Siempre es la misma historia.
T/N se sienta de nuevo, pero sin ganas de comer ya nada más. Entonces, en uno de sus típico arrebatos de furia, se levanta y se larga.
- Sí me llevará un tiempo...- piensa Sabo.
- Hay que ver... Ésta niña...- dice Nami llevándose una mano a la sien. Mira a Sabo-... ¿Te costará?
- Tal vez... Oh no...
- ¿Qué ocurre?
- Me he olvidado de llamar a Koala... Se enfadará si no lo hago pronto... Le prometí que lo haría cuando llegara.
- Tampoco importa demasiado. Además, ahora estás merendando. Espérate a la noche y le podrás contar más cosas.
- Buena idea.
- Y me puedes contar lo que quieras. Te ayudaré en lo que haga falta. Lo prometo.
- Vale...

Terminan de merendar.
- Nami-san... ¿Puedo pedirte consejos?
- Obviamente. ¿En qué puedo ayudar?
- Verás... ¿Qué puedo hacer si... Mi amor por mi pareja... Empieza a desaparecer...?
Nami sonríe para sus adentros.
- Pues... El diálogo es mejor que no decir nada, porque al final será tarde y tendrás un problema- señala dentro, que es donde está T/N metida.
- Tienes razón...
- ¿Por qué lo preguntas?
- Por nada... En especial... Gracias por atenderme...
- De eso nada. Ahora me lo cuentas. Prometo no decírselo a nadie.
- ¿Seguro?
- Si lo hago me voy del barco para siempre.
- De acuerdo...

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- Kaya, tenemos un problema.
- ¿Usopp-san? ¿Qué ocurre? ¿Es algo malo?
- Dentro de lo que cabe un poco sí.
- Cuéntame.
- Se ha enterado...
- ¿Fue cuando me colgaste de repente?
- Sí... Seguro que fue gracias a Nami... Siempre está husmeando en todos los sitios...
- No te preocupes. ¿Acaso te duele? Estás conmigo, ¿no? ¿Pues qué te importa que se entere o no?
- No lo sé... Pero...
- Véngate.
- ¿Eh?
- ¿No te da rabia?
- Bastante... Y me trata muy mal.
- Entonces tienes todo el derecho del mundo a vengarte. Sólo piensa en algo que puedas usar para que ella no se dé cuenta. Puedes... Sabotear algo que le guste. No sé...
- Ya tengo algo en mente. Me has dado una muy buena idea...
Ambos ríen.

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- ¿Sabo-kun?
- Hola, Koala-san.
- ¡Hola! ¿Qué tal vas por ahí?
- Confuso.
- ¿Por qué?
- No lo sé... Me siento así desde hace rato...
- ¿Me lo puedes explicar o mejor no?
- Sólo si prometes no enfadarte.
- No prometo nada que no pueda cumplir.
- A ver... Esque... Creo que... No debería haber venido...
- ¿Y eso?
- Pues... La emergencia era ayudar a una nakama de Luffy a tener la vitalidad de antes... Porque... Sufrió un desengaño amoroso... Después de una relación de dos años...
- Ostia... No me enfado.
- Lo malo es... Que... Ella... No sé... Fue raro cuando la vi...
- ¿Sabo? Pareces muy ausente... ¿Te han hecho algo malo?
- Jamás harían algo así, Koala-san.
- Supongo que puedo fiarme. En fin, suéltalo de una vez.
- Este... Yo... Creí que esto iba a ser fácil... Pero... No esperaba que ella... Fuera... Tan linda...