Untitled / Matheo Riddle.

Capitulo 1

Eran las 10:30 de la mañana, estaba terminando de arreglarme para poder ir con mi padre al Famoso Callejón Diagon, era mi primera vez visitando este, ya que desde que recibí mi carta mi padre se encargo de comprar todo el solo.
Por fin el día de mañana ingresaría a Hogwarts según mi padre , la mejor escuela de magia y hechicería del mundo, había escuchado tantas historias de él y sus amigos que estaba fascinada con poder asistir y por fin observar todo con mis propios ojos.

Bajo las escaleras, donde mi padre ya estaba esperándome.

-Lista?

-Siempre. - Respondo con una sonrisa.

-Dame tu mano usaremos aparición. -Dice con una sonrisa. -Porque a la señorita Lyra, no le gusta usar Polvos Flu. -Dice burlándose.

Antes de que pudiera decir algo sentí que me apretó la mano y cerré los ojos, al abrirlos note que ya no nos encontrábamos en casa, si no el Callejón Diagon.

Había bastante gente y tiendas, nunca había venido y todo me parecía sorprendente.

-Cierra la boca, te entrarán moscas. -Dice en tono burlón.

-Jajaja, que gracioso, no estaría tan sorprendida, si alguien me hubiese traído desde hace mucho aquí. -Dije volteando los ojos.

-Pido disculpas, pero quería que para mi pequeña esta etapa fuera emocionante, llena de sorpresas, solo para ver tu hermoso rostro iluminarse. -Dice con una sonrisa abrazándome.

Respondo a su abrazo, y es que tiene razón, creo que esta es una de mis mejores etapas, bueno después de cuando empezó a enseñarme acerca de la magia y todo eso.

Sirius, realmente era un gran, gran padre, el mejor de todos y me encantaba el como nos tratábamos, mas que padre e hija, era como si fuéramos amigos, siempre me tomaba como su igual, claro incluyendo los regaños cuando hacia alguna travesura, realmente teníamos una relación bastante buena después de todo solo nos teníamos a nosotros dos.

-Debemos esperar a estas personas por aquí. -Interrupiendo mis pensamientos y tomando mi mano. -Sígueme pequeña.

Comenzamos a caminar, hasta llegar a un lugar un tanto alejado de la multitud.

-¿Tardarán mucho?. -dije mirando hacia abajo.

-Tranquila a penas han pasado 10 minutos desde que llegamos. -respondió

-Agh, espero y no tarden ya me case de esperar. -dije poniendo ojos en blanco.

-Al parecer no, mira, ahí vienen. -dijo señalando a una mujer y un niño.

La mujer se acerco a mí padre para poder saludarle, mientras el niño se ocultaba detrás de ella algo tímido. Mi padre se encontraba más feliz de lo habitual y eso me gustaba.

-Hija, ven te presentaré. -dice con una sonrisa.

Me acerque algo tímida, ya que eran personas que no conocía.

-Hola. -Digo tratando de hacer una sonrisa.

-No seas tímida. -dijo poniendo su mano sobre mi hombro. -Te presentaré. -dijo mi padre. -ella es...