Marcada: Aún soy propiedad de Drake Jacobs.

Capítulo 9- Sueños extraños.

No logró recordar con total claridad lo que sucedió durante las dos horas posteriores a nuestra llegada al hospital. Sólo recuerdo ser llevada a una máquina de rayos x, y luego a una habitación.

-Señora Jacop?- preguntó alguien. Abrí los ojos y era un oficial de Policía.

-Señora Jacop, ¿me escucha?- preguntó.

-Jacobs, no Jacop y si le escucho- dije acomodando me en la cama. Tenía un soporte plástico a modo de yeso en la muñeca y mano izquierda.

-Señora queremos comprobar los hechos que su esposo nos ha planteado- dijo.

-Si-

-El señor Drein...-

-Drake- corregí.

-Si. Drake, nos dijo que usted se cayó de la cama. Dijo que estaba saltando en el colchón borracha y se calló lastimando su mano. ¿Es eso cierto?- preguntó. Aquella habría sido una excelente oportunidad para gritar a los cuatro vientos todo lo que Drake me había hecho pero sería la jugada más estúpida que podría hacer. Drake iría preso por un par de días, mientras mandaría a ejecutar a Leo y Andrew para seguir torturando hasta el fin de mis días. Eso pasó- contesté.

-Señorita Jacop, tenemos varios testigos en el hotel donde se hospedan que afirman que el señor se la llevó a la fuerza del restaurante y que se escucharon gritos en su habitación.-

-Era un juego sexual- inventé de prisa.

-Un... ¿Qué señorita?- preguntó el oficial sonrojado.

-Un juego sexual. Sexo de fin de año, salvaje y delicioso. Lleno de gritos, gemidos y esas cosas. Fue eso lo que escucharon- expliqué dándo le un guiño.

-Oh. Está bien. Que se mejore- dijo notablemente escandalizado.

-La juventud de ahora no tiene nada de pudor- le escuché decir al salir.

En seguida entró Drake con una falsa cara de preocupación.

-No está roto. Sólo se safo- dijo.

-Gracias? Quieres que te prenda una vela Drake por ser tan bondadoso y no partir me el brazo?- dije molesta entonces afuera comenzaron a gritar la cuenta regresiva para recibir el nuevo año. Tres, dos...uno.

-Feliz año nuevo mi amor- dijo Drake.

-Vete al mismísimo infierno-

-Si me voy vendrás conmigo- respondió Drake.

Aquella noche la pasé en el hospital y al día siguiente regresamos a Brujas.

-Madame, qu'est-il arrivé à votre bras ? (Señora, ¿qué le ha pasado en el brazo?) - preguntó aquella empleada que había mostrado preocupación por mí antes.

-No ha sido nada, solo...-

-Sam s'est blessé. Ils feront tout ce qu'elle leur demandera de faire mais elle n'est pas autorisée à quitter sa chambre. C'est compris? (Sam se lastimó. Harán lo que ella les pida, pero no se le permite salir de su habitación. ¿Entendido?) - Dijo Drake.

-Me vas a encerrar? Enserio Drake?- pregunté indignada.

-Aun estoy molesto contigo-

-¿Molesto? Yo no te hice nada!- le grité frente a todos.

-¿Pensar en otro hombre no es hacer nada Sam? Ahh?! ¡Maldita sea! Sube antes de que...-

Subí a la habitación cerrando la puerta de un portazo. Caí al suelo llorando de dolor por las dos heridas, la física y la emocional que Drake me había causado. Me estaba enriqueciendo. Jamás había tenido tantas ganas de acabar con alguien como con Drake.