Code Blue

CAPÍTULO CATORCE

Donghae y Yo nos quedamos en la cocina, mirándonos el uno al otro. Primero se rió, luego me reí.

¿Alivio? ¿Asombro? ¿Choque?

Si.

"Bueno," dije. "Eso fue . . ."

El asintió. "Si. Fue."

Me reí de nuevo, luego lamí la comisura de mi boca.

Por supuesto, lo miró y tomó mi barbilla entre su pulgar y su índice. "El primer hombre al que besé".

Oh wow.

Me sentí mareado, mis rodillas estaban débiles. "¿Y? ¿Como estuvo?" Su sonrisa era malvada. "Divertido." Me empujó contra el mostrador de nuevo, su agarre en mi mandíbula un poco fuerte, me besó de nuevo.

Lengua áspera, dura, profunda y manos seguras. Lo dejé hacer lo que quisiera hasta que mi cuerpo se acercó rápidamente a ese punto sin retorno. Rompí el beso, y esta vez me mordió la mandíbula hasta el cuello. Calientes sacudidas de placer me atravesaron y lo empujé con una risa. "No creo que estés preparado para lo que sucederá si sigues haciendo eso". Tuve que reajustarme. "Cristo."

Él sonrió, engreído. Labios húmedos, deseo en sus ojos. "Probablemente tengas razón." Pero luego buscó mis ojos como si estuviera tratando de encontrar la respuesta a algo en su cabeza. "No sé por qué. . ."

Oh chico. "¿Por qué Qué?"

"¿Por qué tú? ¿Por qué un chico? es absurdo Pero tu . . ."

"¿Pero yo?"

"Sí, pero tú. ¡Acabo de besarte! Y me gustaría hacerlo de nuevo. No tiene sentido. No soy gay. Ni siquiera soy bi. Me gustan las mujeres. Siempre tengo." Sacudió la cabeza. "Pero tu . . . Eres diferente."

"Eh, gracias".

"Y acabas de descargar un montón de equipaje de tu pasado, por lo que mi tiempo probablemente esté muy lejos".

Y casi mueres ayer. Tienes un acosador loco, y tuvimos una gran pelea en la que me despediste y te afeitaste la cabeza esta mañana".

"Yo no te despedí. Bueno, lo hice, pero no lo dije en serio. Ni siquiera creo que tenga la capacidad para despedirte. Estaba loco. Pensé que no confiabas en mí para contarme lo que te pasó. Pensé que teníamos algo, algo más profundo, donde deberías confiar en mí como yo confío en ti".

"Confío en ti."

"Lo sé." Él frunció el ceño. "Y para ser honesto, estaba mayormente enojado contigo porque no dejaba de pensar en ti y en cómo quería besarte y en lo jodidamente extraño que era eso. Me estaba volviendo loco. Es confuso como el infierno. E incluso ahora, realmente no quiero pensar en lo que significa".

Lo suficientemente justo. Conocía el ping pong mental que jugaba cuando me di cuenta de que me atraían los chicos. No quería pensar en lo que significaba o qué etiquetas eran qué.

"No tienes que pensar en eso", le ofrecí. "No tienes que ponerle un nombre a nada, Hae".

Pasó su pulgar por mi mandíbula. Sus ojos miraban con asombro. "Barba incipiente, piel áspera. Estoy acostumbrado a suave y gentil. No sé por qué es diferente contigo. Esto no debería sentirse tan bien.

Me incliné hacia su toque. Había pasado tanto tiempo desde que alguien me había tocado así. De hecho, me hizo sentir un poco mareado. "Guau."

Levantó mi rostro y presionó su cuerpo contra el mío. "¿Por qué esto es tan caliente?"

Solté una carcajada, y en un movimiento rápido, nos di la vuelta y lo apoyé contra el mostrador de la cocina como lo había hecho conmigo, no demasiado enérgico, pero no exactamente suave. Mis caderas contra las suyas, fuertes y rápidas.