Imperfecto.

Prólogo.

Shoto Todoroki sabe lo que su género secundario significa para su vida.

Sus hermanos se manifestaron como alfas, su hermana por el contrario, una omega. Se esperaba la culminación de la obra perfecta de su padre en él, sin embargo, un año después de la manifestación de su particularidad, se dio a conocer como el eslabón más bajo en el mundo: un omega.

"Un don demasiado poderoso desperdiciado en un omega", había dicho su padre. Tal vez la historia hubiera acabado ahí; un simple fracaso más, de no ser porque su madre ya había sido internada en el hospital, así que, sin más remedio reanudó su entrenamiento, ocultó su olor desde el instante, suprimió su primer celo y los posteriores.

Para el mundo: Todoroki Shoto es un Beta.

————————

El olor de Midoriya e Iida golpeó su nariz al instante de abrir la puerta, reprimió una mueca ante el olor. Normalmente no sería un problema, su padre se encargó de entrenarlo para no ceder ante el aroma o 'voz' de cualquier alfa más débil que Enji y siendo el héroe número dos, el segundo alfa más fuerte, le sería difícil doblegarse ante un alfa, casi imposible con un Beta pero, teniendo su celo a solo una semana, junto a la batalla con Stain que dejó sus emociones hechas un revoltijo, se hizo más susceptible.

—¡Todoroki-kun!— los grandes ojos verdes del alfa le dieron la bienvenida, junto a la suave sonrisa de Iida — Estamos a punto de una nueva ronda, ¿Te unes?

Observó la baraja en manos de Iida, con vergüenza oculta miró a ambos negando con la cabeza, eso pareció decepcionar al alfa.

—No sé cómo jugar.

—Oh, te puedo explicar el juego —antes de poder decir más, su rostro se coloreó, miró a Iida — ¡Podemos! ¡Ambos, no solo yo! —y pareció recordar algo importante al decir lo siguiente — ¡Si quieres!

Iida parecía extrañamente divertido, se acomodo en la orilla de la cama dejando espacio libre para él, asintió aceptando la oferta silenciosa.

El juego resultó entretenido. Todoroki descubrió la habilidad de Iida y lo malo que es Midoriya al tratar de reprimir sus expresiones ante una buena mano, la cara carente de emociones de Shoto sirvió para ganar un par de partidas, fue entretenido hasta que la enfermera les aconsejo dormir un rato.

Esperó despierto hasta que sus dos compañeros durmieron, quitó la sábana, se puso de pie y abrió la ventana respirando aire fresco en el proceso.

Olvidó pedirle a Fuyumi inhibidores de aroma, podía sentir su feromonas hacerse más fuerte con los segundos, maldijo en voz baja, comenzando a entrar en pánico.

Respiro hondo, tratando de calmarse, este problema se resolvería pidiendo inhibidores a una enfermera. Tenía que calmarse antes de que alguno de los dos se diera cuenta.

———————

Salió de la habitación sin hacer ruido, tardó unos minutos en encontrar a una enfermera.

La enfermera parpadeó lento hacia su dirección, pasando los siguientes minutos mirándolo fijamente. Reprimió fácilmente sus instintos que le decían volver a la habitación junto a sus dos ¿Amigos? Aún no estaba seguro de poder etiquetar su relación con ambos así.

No tenía tiempo para este tipo de pensamientos.

—¿Me daría supresores, por favor? — su pregunta pareció sacar a la enfermera de su letargo.

—¡Por supuesto! —dio un suave aplauso al aire, sonrió a su dirección — vuelvo enseguida —sin más se alejó trotando hasta perderse en el pasillo.

Todoroki se recargó en la pared con pesadez, deseando que la señora llegará rápido para poder dormir de una buena vez.