7 Enero 2013

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Lo prometido @Sarabell666... Ojalá lo disfruten :D

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Hoy fue el regreso a clases y el primer día de Mattie en la primaria. Mi madre solo se despertó para despedirse y volvió a la recámara para arreglarse e ir a trabajar; mi padre no estaba en casa, seguramente había salido temprano al trabajo para no tener que ver a mamá.

Él es abogado, ella es agente de bienes raíces. Yo tuve que llevar sola a Matt al colegio. Estaba emocionado y yo sonreí al ver que ya se le había pasado la tristeza de hace 3 días, lástima que no durara mucho, pues pronto volverían a pelear, era inevitable y un gran infierno. Lo llevé hasta su salón, me presenté a la maestra, le expliqué nuestra situación y que si necesitaba algo, era preferente que me llamara a mí. Luego me despedí del pequeño y me dirigí a mi propio colegio.

Había avisado que llegaría tarde, por lo que no importó que llegara durante la segunda hora de clase. Kat me había guardado un asiento. El día pasó tranquilo, excepto por el hecho de que mi amiga se la pasó hablando de lo feliz que estaba por Adam y por mí, que hacíamos linda pareja, que sabía que íbamos a regresar, etc.

Al final de la Jornada de clases, salí disparada a recoger a Matt y lo llevé a almorzar. Regresamos a casa, no había nadie, lo cual era extraño pues mis padres ya deberían haber regresado.

Intenté no darle demasiada importancia a ese hecho y me puse a limpiar la casa, ya que mi madre estaba muy ocupada discutiendo con mi padre como para hacerlo ella. Cuando terminé decidí tomar un descanso en el sofá, pero Mattie llegó a abrazarme.

-Hey, jaja… Hola campeón. ¿Sucede algo?

-No, bueno…

-¿Qué paso?

-¿Quieres ayudarme con mi tarea?

-Por supuesto que sí, ¿Qué tienes que hacer?

-Matemáticas

-Ok, vamos, te ayudo.

No nos tardamos tanto, eran unas sumas sencillas. Ya que Mattie había terminado sus deberes, salimos al patio a ver las estrellas, jugamos un rato afuera y entramos. Le preparé la cena y lo llevé a la cama. Lo dejé para que durmiera y bajé al sofá, prendí el televisor y me quedé allí, dispuesta a esperar a que mis padres llegaran.

Para mi sorpresa me quedé dormida en la sala, y jamás hubo un solo rastro de ellos.

Diario de mi Alocada VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora