Todo pasa por una razón

Capítulo 1- Denegada

Denegada- las palabras exactas que están en la carta de mi solicitud a una de las mejores escuelas de danza que hay en todo el mundo.
La academia Brentliard. mi academia favorita.

Dios mío, que decepción, enserio yo creí, creí que iba a entrar a esa academia que ya desde tanto tiempo había estado preparándome, me dan ganas de llorar, termino de leer la carta y cierro de golpe mi laptop, haciendo que mi gatito saltara de un susto 

-Ay, perdón Mika- le dije mientras que ella se volvía a recostar en su canastilla.

Me fui escaleras abajo con los ojos llenos de lágrimas, por ahora solo quiero ser consolada y comer algo.

Al bajar me quede quieta viendo a mi mama como cocinaba, aun que sintió mi presencia porque casi al instante se giró a mí con una sonrisa.

-Saya- mi mama dijo feliz y al ver mi expresión en mi rostro cambio a una postura más seria.

-Y bueno que te han dicho- dijo y se sentó en uno de los bancos de la cocina, hice lo mismo, me senté con ella y pasé mis manos por mi rostro.

-No me han aceptado… denegada, no tiene potencial. Resumiendo todo eso es lo que venía en la carta.

-Claro que tienes potencial- replico mi madre casi al instante. - vas a ver que en la próxima si te van a aceptar- dijo y me puso sus manos en las mías 

-No mama, no habrá una próxima vez, estoy cansada, creo que si una de las mejores academias te rechaza ha de ser por algo no lo crees. - dije cabizbaja 

Tu eres muy talentosa- las palabras de mi mama resonaron un momento en mi cabeza- no solo en la danza, sino en todo lo que te propongas- dijo levantándose del asiento y alcanzando un plato- y no solo yo sino  todos los que te rodean lo saben, ¿aparte si bailaras feo no te lo hubiera dicho ya? - dijo y me sirvió un plato de comida delante de mí.

-Si- sonreí de lado- si tienes razón mami- le dije mirándola, aunque seguía triste por obvias razones 

-No te rindas tan fácil Vallëz- dijo mi mama enfatizando mi apellido

-No te tardes tanto que vamos a salir- dijo y se fue mientras se llevaba el teléfono a la oreja, mientras que yo me quedaba en sumida en mis revoltosos pensamientos, y mientras comía la deliciosa comida de mi madre llegue a un acuerdo conmigo misma.
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Algunas veces me pregunto si las decisiones que tomo son las correctas…. bueno todo el tiempo me pregunto si las decisiones que tomo son las correctas.

-Voy a darme un tiempo- mi mamá se quedó callada escuchándome mientras manejaba 

-Voy a tomar un año completo de descanso, para poder estar con ustedes- le dije 

-Si esa es tu decisión, estoy más de acuerdo contigo, siempre te voy a apoyar, solo que no dejes que esto te afecte, si te quedas aquí, quiero que disfrutes que salgas con tus viejos amigos y que por supuesto sigas bailando.

Sonreí ante sus palabras era lo que necesitaba escuchar.

En el resto del camino fuimos escuchando música en lo que íbamos por mi hermana, ella era 2 años mayor que yo.

Hola chicas! - mi hermana se subió a la camioneta, un momento de silencio 

-Oye... mama ya me conto, vas a ver que al proxi…

-Voy tomar un año de descanso- le interrumpí- voy a quedarme este año y al próximo año volveré a retomar mis planes.

Ella me dijo lo buena que era la idea de descansar, de despegarme de las cosas que me estresaban, también dijo que tal vez descansada y sin presiones me iba a salir mejor las audiciones y así quedaría en una las academias, tal vez tiene razón.

Aunque luego di por terminada la conversación cuando le subí a la música de la camioneta y le pregunté por su novio, sinceramente toda vía me siento agobiada, no quiero hablar sobre el tema, pero a Sara se le pusieron los ojos de corazón al instante y como siempre empezó a hablar de maravillas sobre él y a contar las cosas empalagosas de novios que hacen, como ir al parque agarrados de la mano, hacer “picnicitas” así lo llamaron a las veces que hacían picnic y que eran aparte citas, o como se quedaron leyendo por más de una hora juntos su libro favorito. 

A veces la idea de tener pareja me gusta y mucho, pero estoy demasiado ocupada como para pensar en tener uno, mejor dejo de pensar si no quiero tener otra razón para sentirme mal.

Me distraje al ver que mejor amiga me acaba de mandar un mensaje 

Lila 

Lilis: No lo puedo creer!, ¡me acaba de llegar la carta de Brentliard!

Sayita:Enserio??!

Lilis: Si!, y me han aceptado no lo puedo creer, estoy que chillo de la emoción, ¿ya te llego la carta?

Estoy a punto de contarle que me habían rechazado, de nuevo, pero no quiero hacerla sentir mal 

Sayita:Ay muchas felicidades, que emoción, te lo dije, y no a mí todavía no me ha llegado mi carta

En mis adentros me sentía muy feliz por Lila.

Lilis:Ya verás que a ti también te aceptaran!

Sayita:Esperemos que si :)

Me quede sumida en ese chat como si fuera lo más importante en esos momentos, y me entran las ganas de llorar otra vez

-Saya!!- la voz de mi hermana me trajo de vuelta a la realidad

-Si lo siento- dije y apagué mi celular dándole toda mi atención a Sara 

-Te decía que si querías ir mañana a correr conmigo?

-Ah, sí, sí quiero- sonreí 

-Ya dijiste

Y seguimos el camino, hicimos algunas vueltas mi mama enserio intento lo mejor que pudo en distraerme, y si lo logro, fuimos y compramos algunas cosas.

Me convencieron en comprarme unos tenis deportivos nuevos, según para que valla cómoda a correr con Sara, aunque escuche a mi mama escuchar que ya no quería que usara mis viejos tenis, unos muy lindos, cómodos y llamativos que usaba al bailar.

Ya estaba acostada en la cama  la único que quería hacer era descansar, había sido un día muy decepcionante.

Me sacó de mis pensamientos un mensaje de lila, alcance a ver el mensaje para no tener que abrirlo, 

Lilis:Ya te llego la carta? -

Lilis:Todo bien? -

Decido no responderle, dejo mi teléfono en la mesita, apage las luces de mi habitación abrace a Mika que estaba tratando de safarse de mi agarre  y me quedé profundamente dormida.