Aún soy tuyo - Chanyeol x Jisoo

Capítulo 10: Ella... ¿cómo está?

Narra Chanyeol:

Era difícil describir todo lo que estaba sintiendo en este momento. Tenía una hijo, Jisoo estaba viva. Si me sentía herido, pero estaba tan débil antes de verla que no podía odiarla por lo que hizo. Había pasado todos estos años esperando que llegara mi muerte… deseando verla de nuevo, pero no de esta forma.

Si mi yo de antes de conocerla me viera pensaría que soy lamentablemente, y no es algo que pueda negar, pero estoy cansado… y aunque duele yo solo quiero aferrarme a ella.

Jisoo estaba viva, pero nunca estuvo más lejos de mí, podía sentirlo. Ella, me miraba deseando que no nos hubiéramos encontrado

– No esperaba esa reacción de Shizuo, él debe querer conocerte más, nunca le he ocultado nada, ni lo que hice o lo que era, lo sabe todo. No puedo simplemente decirte que ignores nuestro encuentro y que sigas viviendo tu vida, sé que no lo harás. Además eso podría decepcionar a Shizuo. ¿Tú sigues  con Giglio Nero? – hablo con seriedad y frialdad, omitiendo cualquier tipo de sentimentalismos

– Si… – ella había cumplido lo que dijo ese día, no quería tener un hijo y mentirle

– El que puedas estar tranquilamente en un sitio público como este significa que has seguido ocultando tu identidad muy bien, dónde vivimos es más alejado, es seguro. Así que si puedes seguir manteniendo un perfil bajo podemos hacer que tus visitas sean seguras para él – Jisoo había analizado rápidamente el escenario – No te pediré que dejes Giglio Nero, si quieres hacerlo por tu cuenta hazlo, pero no esperes nada de mi hacia ti, además de una relación cordial por nuestro hijo – esto era lo más lejano y contrario a mi sueño de verla de nuevo

–  Mi rostro y nombre real  sin ser identificados… yo sé cómo ocultarme para que no estén en riesgo – ahora sentía la realidad golpearme, si… no había forma de que fuéramos una familia feliz, esa clase de final no es para personas como nosotros, para personas como yo.

– Lo mejor será que no vengas con tanta frecuencia y no vueles nunca directamente desde Corea hasta aquí. Intenta ir primero a lugares diferentes, quédate un tiempo, y luego aquí a un aeropuerto pequeño. Asegúrate de no ser seguido y luego contáctame para decirte dónde nos veremos – tenía sentido

– ¿Cómo puedo contactarte? – ¿Podría acostumbrarme a esto? Su tono frío, su rostro indiferente

– ¿Tienes un bolígrafo? – preguntó

– Si – llevaba uno en mi bolsillo

– No tengo celular, pero puedes contactarme a este número. Es de mi lugar de trabajo – había tomado una servilleta y escrito – Mi nombre ahora es Satowa Kudo, si dices Jisoo no sabrán quien es –

– Entiendo… Jisoo – busqué sus ojos, pero ella no pudo mirarme por mucho tiempo, seguro me veía mal. Ella había comenzado a tomar su café que estaba casi frío – Mina ha crecido mucho… – no sabía que decirle hasta que recordé a Mina, escuchar ese nombre la afectó, pude verlo en su rostro. Dejar a Mina y Hani, engañarlas, seguro no fue fácil

–  Ella... ¿cómo está? – preguntó pausadamente

– Está bien, en cierta medida. Ella no pudo ser lo que querías que fuera, intentó quitarse la vida un par de veces desde tu muerte. Yo quise darle un sentido para vivir y que usará su odio hacia mí para lastimarme lo que me quedaba de vida. Ella aceptó, no está directamente en Giglio Nero, pero trabaja conmigo en el tráfico de órganos y con la administración de mi prostíbulo – sabía que decirle eso era posiblemente colocarme una soga al cuello. Su rostro se oscureció al escucharme

– ¿Y Jimin y Hani? – podía ver lo mucho que le estaba costando asimilar lo que dije

– Hani se enamoró, ella vive ahora en Tailandia y cada cierto tiempo viene a Corea a ver a Mina y Jimin. Jimin pertenece a un importante estudio de baile y ha estado trabajando como coreógrafo, su relación con su padre mejoró, ellos se llevan mejor que antes – le conté – Ambos llevan vidas normales y siguen al pendiente de Mina – el tiempo había cambiado muchas cosas…

– Creo que ya hablamos lo suficientemente… debo volver – ella se levantó sacó dinero de su bolsillo y lo dejó sobre la mesa – Termina tu café, no es necesario que me acompañes, Shizuo ya se despidió de ti – dolía mucho la forma como me trataba

– ¿Debo mantener el secreto de que estás viva? – pregunté

– No se si eso tenga algún sentido ahora. Aunque si alguien además de ti quiere verme prefiero que sea en Corea. Tampoco puedo huir de nuevo así lo quiera – respondió

– ¿Incluso Jimin, Mina y Hani? – continúe

– No son una excepción – respondió – No quiero exponer a Shizuo a nadie – sabía que se refería a Giglio Nero. No podía sentir envidia de mi propio hijo, aún así, no sabía cómo sentirme al 100%, era confuso

– Hasta luego Chanyeol – se despidió.

Ella había cambiado su vida por completo. Todo lo que siempre había querido, una vida normal, sin peligro. Yo nunca formé parte de ese plan… no podía… y aunque quería abrazarla, correr detrás de ella, gritarle lo que sentía, no lo hice…muchas emociones para un solo día y sinceramente no sabía si había actuado de la forma correcta.