Luego de aquel estiramiento de mejillas, las dos se habían calmado un poco, pero la Caballera aún tenía que organizar un poco su mente.
- Princesa.
- Si, dime.
- Quiero salir un rato ¿puedo?
- No creo que deberías moverte mucho –dijo la Princesa con ligera preocupación –Favi me dijo que era mejor que descansaras.
- Te prometo que no voy hacer nada extremo – dándole una mirada de súplica a la Princesa – solo quiero dar una caminata.
- Bueno... -la Princesa miro esos ojos de súplica y casi parecía un perro, hasta se imaginó que tenía unas orejas de perro, como una ¿inuit? – está bien, pero si veo que estas mal nos devolvemos y no te guardes nada ¿lo prometes? – miro directamente a la Caballera.
- Si, lo prometo – un poco intimidada por la mirada de la Princesa.
Se alisto para salir, busco su armadura, pero la Princesa dijo que no la necesitaba, entonces salieron de la tienda.
La Caballera aprecio los últimos rayos de sol y la aparición de las estrellas, algunos de los caballeros se fueron a dormir, mientras que otros se preparaban para el turno nocturno.
Percatándose donde estaba, movió la cabeza para atrás, vio el letrero que tiene dibujada la cara de la Princesa.
- Te trajimos a mi tienda porque la zona de recuperación esta aun llena – respondiendo a la cara de duda que mostro la Caballera – yo les dije te llevaran a mi tienda y te estaría vigilando.
- Gracias Princesa – con una ligera sonrisa.
Camino en rumbo hacia el Mesón.
En el camino vio que aparte de los caballeros que estaban haciendo vigilancia, también había gente del desierto, practicantes de artes marciales de la Ciudad Shen, y extrañamente también estaban cooperando personas de la montaña Tiritona.
La Resistencia es un conjunto de caballeros y varios combatientes de los supervivientes, cada uno con diferentes formas de pensar y luchar, si intentaras que luchen juntos, en poco tiempo se desorganizarían y se volvería un completo caos. Diferentes del Imperio Rah los cuales sus fuerzas están bien organizadas y probablemente ya saben cómo organizarse con los Teatán.
¿Cómo podía organizar la Resistencia?
Llegaron al Mesón, o lo queda del Mesón.
Las noches en Heavenhold eran hermosas, pero el sistema de iluminación se desactivo para ahorrar recursos, ahora lo que iluminaba la superficie son antorchas y algunas lámparas, pero por alguna razón la Caballera lo sintió más acogedor.
Miro hacia aquel huevo grande que estaba encima de los árboles, lastimosamente quedo partido, y luego de limpiar el líquido que había dentro, ahora solo era una cascara vacía ¿Qué ser iba a nacer de ese enorme huevo? Nunca sabrá la respuesta. Pero noto como algunas de las ramas de los arboles le crecían una que otra hoja.
Heavenhold se estaba recuperando lentamente, pero aquella ligera muestra de vida era fruto de sus resientes esfuerzos.
Su vista ahora estaba postrada sobre la Fragua, pudo ver una luz que salía del enorme hueco del casco.
Recordó aquellas noches con la Capitana Eva en la sala de reuniones.
- Antes de ir al Imperio Rah – sin quitarle la vista a la Fragua – la Capitana Eva me estuvo enseñando sobre estrategias, todas las noches antes del viaje me ponía estudiar y siempre tomábamos una cantidad insana de café.
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Guardian Tales - Y aun así... sigo mirando hacia adelante
FanfictionUna historia que cuentan la vida de la Caballera luego de quedarse en el futuro