Quise creer... que nuestra familia era perfecta

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- Lena... cariño ... yo no tengo problemas que te quedes en casa todo el tiempo que estimes necesario, tú hermano se esta encargando de maravillas de L-Corp, no lo niego...- decía mi madre intentando contactarla aunque sea de manera visual conmigo - pero cariño... no hay mas espacio en esta habitación...- dijo riendo, y logrando que la mirara también de una manera graciosa, realmente llevo dos meses desconectada de todo lo que respecte a Ciudad Nacional, L-Corp, Catco, los superidiotas, y la estupida de Supergirl, ya la había hecho sufrir, golpeado, y humillado cientos del veces en Obsidian, luego de eso me dediqué al arte, más específico a la pintura, sin presumir he realizado cientos de cuadros, lástima que todos ellos tengan una carga de rabia, decepción y pena tan marcada, no solo era Supergirl quien me había engañado, era Kara, esa Kara por la cual estuve dispuesta a dar mi vida por ella, estúpidamente, ya que al final de todo, ella era la chica de acero, realmente era indestructible. O realmente eso era lo que aparentaba, la última vez que la vi, personalmente y no en mi mundo de realidad virtual que realmente era mucho más agradable que el mundo real en este minuto, la última vez que la vi la dejé encerrada, y llorando en la Fortaleza de la Soledad, recuerdo que intento comunicarse conmigo un par de veces, incluso Alex y sus amiguitos trataron de intervenir por ella, pero ella, y todos esos idiotas no tenían ni la minina idea de lo que habían provocado en mi. Desde ese minuto Lilian y Lex prácticamente me protegieron de todo lo que respectaba a esas personas, me alejé de la ciudad y me vine a la mansión de los Luthor, la cuál indetectable, e incluso Lex, muy orgulloso colocó una estela de Kriptonita para alejar a la rubia o a su primo de nuestras vidas.
- Si mamá... quizás vuelva a la ciudad- le comenté mientras volvía a colocar un pincel en el cuadro - pero... quizás no aún... - la mire un segundo y le sonreí - pero tranquila... me enseñaste bien... y de una Luthor nadie se ríe.- terminé.

Sentí un tipo de explosión en la sala, una explosión que me hizo colocarme rápidamente de pie y una mirada de precaución por parte de mi madre - esto es imposible- dijo ella dirigiéndose a la puerta, tan rápido como su seguridad privada llegó a nosotros, nos cubrieron a ambas y entre muchos murmuros escuché decirle de parte de uno de ellos a Lilian "La DEO", ella me miró de reojo e hizo que el de seguridad se callara, nos hicieron caminar por unos pasadizos, pero fue realmente inútil, tanto que de pronto estaba Alex apuntando a mi madre rodeada de agentes de la DEO, era una Alex ojeriza, delgada, y con unos ojos rojos, ojos que creo haber visto antes, rojos de rabia, y ¿dolor?. - ¿Donde está tu maldito hijo Lilian?- le grito ella, tan fríamente que hasta s mi me asustó su tono, mi madre hizo una señal a los guardias y bajaron las armas, incluso los agentes de la DEO, todos excepto Alex - Lilian... si algo le pasa... si no vuelve a despertar... te juro que desearás haber pasado por la cárcel...- dijo ella antes de descontrolarse y ponerse a llorar, no entendí absolutamente nada, Jhon se acercó a ella y le quito el arma - La salvaremos Alex... - le dijo en un tono y abrazo paternal del cual a pesar de mi rabia quise ser parte.

- Lex... lleva un par de días lejos de la mansión Agente Danvers- dijo mi madre en un tono muy sereno, ¿Acaso ella sabía algo? ¿acaso ella sabía que Lex había echo algo? ¿Acaso lo estaba encubriendo - Mentirosa!!! - le grito Alex intentando alcanzarla pero un agente la sostuvo - Por favor Lilian... por favor... esta muriendo...- dijo ella desmoronándose, fue tan desgarradora la escena que me conmovió y quise acercarme a ella pero me apartó de un manotazo - Te odio Lena, te odio a ti y a tu puta familia!... debes estar feliz de todo esto... - decía con una rabia que me perturbaba, un llanto descontrolado, de verdad sea lo que sea que haya pasado no tengo la menor idea - Supermán tuvo que congelarla - dijo casi gritando de impotencia - congelarla por que no sabemos cómo extraer una puta bala de Kriptonita ni lo que sea que le haya incrustado tu puto hermano a esa puta bala... que está en su corazón maldita sea - ella grito tomándose la cabeza, me sentía realmente desconcertada, acaso... acaso se refería a - ¿Kara?- le pregunté, realmente quería equivocarme, pero la rabia que derramaba su mirada, y la seriedad de la mirada de mi madre lo habían confirmado, la mire desconcertada y con una sensación en el pecho difícil de descifrar - ¿Tu lo sabias?- increpé a mi madre, y Ella permaneció inmóvil y sería, me quito la mirada y extendió sus manos hacia un agente de la DEO permitiendo que la arrestaran - Solo Lex y yo... estamos involucrados - dijo mi madre recibiendo una cachetada en seco por parte de Alex - si no despierta... créeme que habrá valido la pena...- dijo ella caminando esposada a la salida, no sabía que hacer ni cómo reaccionar, sentía rabia, odio nuevamente, un odio indescriptible, odiaba a mi madre y a mi hermano, porque si algo le pasaba... si algo realmente le pasaba a Kara, no se los perdonaría.

- John!- le grite a sus espaldas, ellos ya iban de salida - John! - le insistí, pero apenas se volvió a mirar y me movió la cabeza en forma de negación - Por favor John! Escúchame- le supliqué, el se freno en seco, suspiro unos segundos y se volteó a verme - Lo lamento.. yo no sabía - el seguía observándome un poco confuso, le tomé las mano y se las coloqué en mi cabeza - lee todo lo que necesites... pero créeme... - el volvió a suspirar y cerró los ojos, luego respiró aliviado, y me permitió abrazarlo, fue tan sincero y necesario que sentí como una lagrima recorría mi rostro, y otro mi frente, ya que esa lagrima no provenía de mí - Lo siento Jhon... pero, ¿Que ocurrió?- le supliqué - Puedo ayudar!.... Puedo encontrar la cura... pero John... por favor, llévame con ella!- le supliqué entre sollozos, no podía perderla, no antes de recuperarla.

A un paso de perderla... a un paso del perdónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora