REFLEJO

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Estoy sentado en la parte trasera del coche de Alan, Hannah está a mi lado murmurando palabras de ánimo pero no soy capaz de escucharla, solo haría sentirme más miserable de lo que ya me siento. No quiero su perdón, no me lo merezco. Ni el de ella, ni el de los demas, les cause demasiado dolor.

Alan no dice nada, se dedica a conducir en completo silencio. Reconozco la canción que suena en un tono muy bajo, Walls de Michael Korbin, me centro en la melodía para no pensar en nada más. Presto atención a la letra. Que ironía.

Siento la mano de Hannah encima de la mía y me remuevo en mi asiento. No lloro. No puedo permitirme hacerlo. No se me va de la cabeza la reacción de Jessy y MC. Soy una persona horrible. Tengo miedo a la llegada a la cabaña. No quiero ver la cara de decepción y odio de los demás y menos aún la de Jessy.

No sé cuánto tiempo llevamos aquí metidos, se que bastante, pero también se que no estamos muy lejos. Me deslizo apoyando mi brazo en la puerta del coche, contengo la mueca de dolor. Mierda. El disparo. Jodido Dan. ¿Cómo voy a solucionar esto?

Hannah murmura otra vez algo que ignoro. Alan coge un desvío y se que estamos a apenas a uno o dos kilómetros de la cabaña. Cojo aire. Pero empiezo a sentir náuseas. Según avanzamos el malestar aumenta. Hannah está mas emocionada según avanzamos. Noto su entusiasmo.

Alan frena y levanto la mirada. Hemos llegado. Hannah sale corriendo. Ninguno sabe nada de que iríamos. Realmente no sabía ni yo que estaría en esta situación. Cuando vi a Alan dentro de la mina no podía creermelo. ¿Cómo demonios consiguió entrar?

Cleo sale corriendo de la casa y me abraza al verme. ¿Pero... por qué?

Mi cabeza es un torbellino de preguntas y confusión que se unen y bailan a la par. Jessy sale segundos después mientras Cleo se aparta. Se queda paralizada y yo igual.

Hannah aparece a mi lado con Lilly, Thomas y Dan. Me dan la bienvenida uno a uno, emocionados, con ojos llorosos, menos Jessy.

MC y ella no les dijeron nada. ¿Por qué ocultan el monstruo que fui?

— No olvidéis pasar mañana por mi despacho como hemos hablado.— Hannah y yo asentimos.— Por cierto.— Hace una pausa — ¿Podéis avisar a MC para que ella se pase también? Igual si la animáis vosotros...— Deja la frase en el aire y se que todos sabemos a qué se refiere. Por mi parte no voy a hacerlo. Alan sube a su coche con una despedida general y se va.

—¿Quién es MC?—Todos giramos a la vez la cabeza hacia Hannah. Tiene que estar de broma.

— No me jodas, Hannah.— Miro a Dan que a sido el único en hablar.— Nos estás vacilando, ¿Verdad? — Ella niega nos miramos entre todos.

Cuando mi mirada se cruza con Jessy, ella la retira rápidamente.

—Hannah, tú nos mandaste su número.

—No, te mandé el de Jake.— Mira a Thomas.— Cuando me atacaron iba hablando con él por teléfono por eso te envié su número.

—¿Entonces Jake metió en esto a MC?

—¿Para que Thomas? Quiero decir... ¿Que gana el con ello? Ni siquiera es el hombre sin cara.— Jessy se calla de golpe.

Mi cuerpo se tensa al oir ese nombre salir de sus labios.

Van a pillarme ya.

—Richy. ¿Todo bien?— Miro a Thomas para intentar calmarme.— Estabas temblando.

—Lo siento. Estoy un poco aturdido aun.— Tengo un nudo en el estómago. Me merezco esto y más.

—¿Y cómo fue entonces que enviaste otro número? — Dan saca su teléfono y busca el número de MC.— Busca el número de jake.— Hannah hace lo que Dan le pide.

DUSKWOOD - DETRAS DE LA MASCARADonde viven las historias. Descúbrelo ahora